Salud
Se acaba la medida que ha permitido dispensar medicamentos con una prescripción caducada
Los pacientes con enfermedades crónicas tienen que llamar al CAP o conectarse a 'Mi Salud' para renovar las recetas
¿Cómo impacta en el ciudadano este cambio?
«Si el plan de medicación todavía está vigente porque está dentro del año inicial de la prescripción, se le dispensará aunque no lo lleveimpreso. Si el plan está caducado, hasta ahora se le decía que no sufriera y que más adelante ya lo renovaría. Ahora le dirán que llame a su centro de salud por si lo puede renovar telefónicamente o con una visita telemática o bien si hay que hacerle un control clínico», explica la gerente del Medicamento del Servicio Catalán de la Salud (CatSalut), Caridad Pontes, en el ACN.
La medida tenía como objetivo principal «proteger» pacientes con enfermedades crónicas y que se pueden encontrar en una situación frágil en un momento en qué el mensaje principal era quedarse en casa siempre que se pudiera, recuerda Pontes. Además, daba margen a los responsables sanitarios para potenciar herramientas de atención remota, como la asistencia telefónica y la consulta electrónica (eConsulta).
Necesidad de controles clínicos
Los tratamientos de los pacientes crónicos necesitan una supervisión al menos anual. En los momentos más duros de la pandemia, que habían precipitado el confinamiento de la población, los responsables sanitarios asumieron que el riesgo de no tener esta supervisión durante unas semanas era menor que el riesgo de acudir a los servicios médicos en aquellos momentos.
El coronavirus ha acelerado el despliegue de la telemedicina durante estos meses y se considera que ahora es más fácil contactar con los médicos para valorar si se puede renovar la receta sin necesidad de personarse en los centros.
Cuando la propagación del virus ha disminuido y en un contexto de desconfinamiento gradual, los pacientes que requieren pruebas y exploraciones tienen que ir volviendo a los centros sanitarios. «Tampoco podemos dejar de hacer los controles clínicos a los pacientes que lo requieren», advierte Pontes.
La gerente del Medicamento asegura que estos pacientes pueden estar tranquilos y no tienen que tener miedo de ir a los ambulatorios si los médicos les indican que es necesario y que lo pueden hacer. Las salas de espera están habilitadas para garantizar las distancias de seguridad entre pacientes, que además, se citan de forma más espaciada; los circuitos de personas con síntomas respiratorios están separados del resto y el uso correcto de mascarillas reduce el riesgo de contagio, indica.