Ni rastro de turistas extranjeros todavía en el centro de Barcelona
La catedral, plaza Real, la casa Batlló y la Pedrera esperan a los primeros foráneos con la reapertura de fronteras
El centro de Barcelona todavía está prácticamente vacío de turistas extranjeros, a pesar de la reapertura este domingo de las fronteras en los países del espacio Schengen.
Los pocos visitantes que recorren los lugares más emblemáticos de la capital catalana –como la catedral o la plaza Real- son básicamente gente autóctona (de Barcelona mismo o de comarcas) o provenientes de otros lugares del Estado.
La casa Batlló y la Pedrera, en el paseo de Gracia, se mantienen cerradas al público y en las puertas de las dos icónicas obras de Gaudí no hay ni rastro de turistas.
La casa Batlló tiene previsto reabrir el próximo 1 de julio, mientras que la Pedrera esperará un poco más y volverá el 15 de julio «con mascarillas, control de temperatura y aforo reducido».