Judicial
Empieza el juicio por desobediencia a la Mesa del Parlament del 2017
La fiscalía pide 20 meses de inhabilitación para Corominas, Barrufet, Guinó, Simó y Boya por desobedecer al TC
El ministerio fiscal los acusa de ser «conscientes» que incumplían el «deber de inadmitir actuaciones», a pesar de las múltiples advertencias y requerimientos del TC, «desoyéndolas, sabiendo que eran abiertamente inconstitucionales, de manera que dieran aparente cobertura jurídica al proceso de independencia». Entre estas resoluciones, destacan la de inicio del proceso constituyente el 9 de noviembre del 2015, la comisión de estudio del proceso constituyente y la aprobación de sus conclusiones, la resolución del debate de política general del 2016 sobre el referéndum y el proceso constituyente, la aprobación de los presupuestos del 2017 con una partida para el 1-O, las leyes del referéndum y de transitoriedad jurídica del 6 y 7 de septiembre y la aprobación de la sindicatura electoral.
La Abogacía del Estado cree que tendrían que haber paralizado y no haber admitido a trámite todas las propuestas contrarias en la Constitución y recuerda que tuvieron «múltiples advertencias y requerimientos personales» del Tribunal Constitucional para hacerlo y, en cambio, «votaron sistemáticamente» a favor de estas iniciativas.
Inicialmente el juicio se tenía que hacer en el Tribunal Supremo, pero cuando la expresidenta Carme Forcadell quedó como única encausada de la Mesa por rebelión, el resto de encausados fueron devueltos al TSJC. La vista oral se tenía que celebrar entre el 19 y el 22 de noviembre del año pasado, pero se pospuso unos días, hasta finales del mismo mes y principios de diciembre, porque coincidía con otros juicios de los abogados. En aquellas nuevas fechas tampoco se pudo hacer porque uno de los acusados, Joan Josep Nuet, había sido escogido diputado en el Congreso y, por lo tanto, se convertía en aforado ante el Tribunal Supremo. El TSJC remitió la causa contra él al alto tribunal español. Al principio de febrero el alto tribunal catalán fijó el inicio de la vista para el 23 de abril, festividad de Sant Jordi, pero el confinamiento por la pandemia volvió a retrasar la vista hasta este julio.
Este martes por la mañana está prevista la declaración de los cinco acusados. Por la tarde se prevé que declaren como testigos los dos miembros de la mesa no acusados, José María Espejo Saavedra (Cs) y David Pérez (PSC), así como los letrados y juristas de la cámara, Antoni Bayona, Xavier Muro y Pere Sol. El último a declarar el martes será el expresidente del ParlamentErnest Benach (ERC).
Para el miércoles por la mañana se prevén diez testigos, entre los cuales los diputados o exdiputados de la CUP Carles Riera, Eulàlia Reguant, Albert Botran y Gabriela Serra; los exdiputados de JxSí Ferran Civit y Antoni Castellà; el exdiputado de Catalunya Si que es Pot, Albano Dante Fachin, y Mercè Arderiu, letrada del Parlament.
El miércoles por la tarde y viernes por la mañana será la hora de las conclusiones definitivas de las partes, la presentación de los informes finales y el derecho al último turno de palabra por parte de los acusados.
El tribunal estará formado por los magistrados Jesús María Barrientos, presidente del TSJC, Carlos Ramos, que será el ponente, y Jordi Seguí. Simó recusó los dos primeros, pero la petición fue denegada. El juicio tendrá la peculiaridad de que por primera vez en el TSJC uno de los acusados, Mireia Boya, hablará en aranés, lengua cooficial en Cataluña, y contará con un intérprete al catalán durante su declaración y el derecho al último turno de palabra.