Cataluña «ya está en una fase de control» de los brotes de coronavirus

El director del CCAES no descarta que el Estado aplique medidas más drásticas si la evolución de la pandemia empeora

Personal sanitario cogiendo muestras er una prueba PCR a una joven. — coronavirus, PCR, pruebas, personal sanitarioEfe

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Creado: 10.08.2020 | 22:30

Actualizado: 10.08.2020 | 22:30

El director del Centro de Coordinación de Alertas y Emergencias Sanitarias (CCAES), Fernando Simón, ha afirmado que Cataluña «ya está en una fase de control» de los brotes de coronavirus y que la situación en Barcelona aparentemente se ha estabilizado e incluso ha empezado un «suave descenso». En el caso de Lleida, ya hace días está «descendiendo». En rueda de prensa este lunes por la tarde, Simón ha celebrado que la aparente estabilización de Barcelona «implica que las medidas que se aplican tienen capacidad de controlar los brotes» incluso en «lugares tan complicados» como las áreas metropolitanas. Sin embargo, Simón no ha descartado que el Estado aplique medidas más drásticas si hiciera falta.

Simón ha defendido que hasta ahora las CCAA están haciendo un trabajo «excelente» y cree que las herramientas de control que tienen a su alcance «podrían ser suficientes». Sin embargo, ha dicho que «si se ven superadas las capacidades actuales» y las «herramientas legales de que disponen», «se aplicará lo que se tenga que aplicar».

«No duden de que si es necesario aplicar todas las herramientas, se aplicarán», ha asegurado. Simón ha dicho que, por ahora parece que «están funcionando» las medidas de las CCAA, pero que se podrían tener que tomar «medidas más drásticas» si hay que actuar en territorios mayores o en situaciones que superan el ámbito de una CCAA.

En este sentido, ha mencionado el Estado de alarma, ya sea «más generalizado» o en alguna zona concreta.

Mayoría de contagios en jóvenes

Simón ha reiterado que la mayoría de casos que se están infectando son jóvenes. Más del 70% de los casos que se están observando son menores de 30 años pero un 10% son mayores de 65 años. Baja el número de personas vulnerables pero todavía hay y eso hace que el número de muertes «no sea despreciable».