Judicial
El Supremo inhabilita al presidente de Cataluña Quim Torra por desobediencia
Aragonès asumirá atribuciones de presidente y las elecciones podrían llegar entre finales de enero y principios de febrero
Después de este periodo breve, el Supremo ya envía la sentencia al TSJC. Cuando el tribunal catalán notifica la sentencia a Torra es cuando el presidente ya ha sido cesado, ya que la decisión toma efectividad. Se espera que el mismo día se publique un decreto firmado por el rey español, Felipe VI, en el BOE y simultáneamente en el DOGC, para comunicar el cese de Torra.
Calendario electoral
A partir de aquí, el Gobierno ya perderá el control del calendario electoral, y la pelota pasará al tejado del Parlament. Torrent tendrá 10 días hábiles para abrir consultas y buscar un candidato o candidata a la presidencia de la Generalitat. Si no hay ninguno, o no con apoyossuficientes para ser investido, Torrent podría convocar un pleno para constatar la falta de candidaturas a la investidura.
Este pleno, que sería un «acto equivalente» a un pleno de investidura, permitiría a JxCat y ERC negociar la fecha de las elecciones, al menos para hacerlas coincidir en domingo. El informe jurídico de la Generalitat permite cierto margen a los grupos que dan apoyo al Gobierno porque no aclara ningún plazo, y se podría convocar a días o semanas vista. Sin embargo, los republicanos quieren acortar tanto como sea posible la transición hasta la cita con las urnas.
Esta sesión plenaria activaría el reloj y empezarían dos meses para seguir buscando candidatos a una investidura. Si, agotado el plazo, tampoco hay ningún diputado o diputada que opte a una investidura, las elecciones tendrán lugar al cabo de 54 días -según la LOREG-, o entre 40 y 60 días -según la ley de la Presidencia. Si se cumplen los plazos y no hay sorpresas, las elecciones se podrían celebrar el 31 de enero o el 7 de febrero.
Aragonés, presidente sustituto
El Gobierno estará en funciones desde que el TSJC notifica la sentencia a Torra y hace efectiva la decisión del Supremo. El ejecutivo no podrá presentar proyectos de ley -pero sí decretos si son de urgencia-, de manera que tampoco podrá tramitar los presupuestos del 2021. A partir de aquí, Aragonés -todavía como vicepresidente- tendría que convocar una reunión extraordinaria del Consejo Ejecutivo, donde el resto de consellers y conselleres avalarían el decreto de sustitución del presidente de la Generalitat -y, por lo tanto, aceptarían de factola sentencia del Supremo y la destitución de Torra. Este decreto se enviaría al Parlament.
Como presidente sustituto, Aragonés no podría convocar elecciones, nombrar ni cesar consellers o conselleres, ni someterse a una cuestión de confianza en el Parlament. Según el informe jurídico de la Generalitat, tanto Aragonés como los consellers y conselleres del Gobierno se tendrán que seguir sometiendo a las sesiones de control del Parlamentdurante el interinidad. Según el informe jurídico, también será Aragonés quien acabe firmando la convocatoria electoral.