Torra, Puigdemont y Mas piden mediación internacional para resolver la situación de Cataluña

Los dos expresidentes de la Generalitat y el presidente inhabilitado han escenificado este viernes desde la Casa de la Generalitat de Perpiñán una imagen «de unidad» y de cohesión. Los tres han asegurado ser víctimas de la «represión del estado español» y se han autoproclamado militantes «del partido de los presidentes represaliados por el estado español». En este sentido, el expresidente Mas ha dicho que la situación «rebasa los partidos». «Nosotros estamos aquí porque hemos sido presidentes de una institución», ha insistido a preguntas de los periodistas sobre su posicionamiento de cara a las próximas elecciones.

«Los tres estamos sufriendo una persecución judicial y económica y tenemos causas judiciales pendientes de resolución en los tribunales europeos, en los que confiamos mucho más que en los españoles», ha dicho Mas. El expresidente ha asegurado que no han organizado el acto para quejarse ni «exhibir heridas» sino para explicarse y «hacer pedagogía». «Es una anormalidad absoluta y hay que recordarlo», ha dicho. «Se le tendría que decir al estado español que es una estupidez contestar la política por la vía judicial», ha añadido.

Puigdemont, por su parte, ha asegurado que el acto busca «denunciar la persecución política». «Los catalanes tenemos el derecho de ser y no sólo a que nos toleren sino que nos respeten», ha insistido. En este sentido, ha dicho que seguirán trabajando por la defensa de los derechos fundamentales con «paz, democracia y la palabra». También ha destacado el hecho de que en los seis años que hace que Felipe VI es el jefe del estado español todos los presidentes de la Generalitat han sidoo bien inhabilitados o destituidos.

Puigdemont considera que este hecho tiene que suponer una «vergüenza» para aquellos cargos políticos «que lo han alimentado o bien que lo han dirigido». «Es un récord que quizás encaja en la tradición de los Borbones», ha sentenciado Puigdemont. El expresidente y exalcalde de Girona ha dejado claro que el encuentro en Perpiñán estaba planificado antes de saber que el monarca visitaría Barcelona, y por lo tanto, no han pretendido contraprogramarlo.

Torra también ha aprovechado para denunciar que el autonomismo deja «con las manos atadas» a Cataluña y que «la deriva autoritaria del Estado ha llegado a tocar derechos fundamentales». «La represión continúa, mande quien mande y sea del color que sea», ha asegurado. «Nosotros somos el ejemplo que no es posible esperar una justicia de imparcialidad en el estado español y que la única posibilidad que tenemos para nuestras causas es Europa».

Por eso, los tres han reclamando en un manifiesto conjunto «mediación internacional» para resolver el conflicto catalán. Puigdemont ha afirmado que «no habrá mediación internacional si no la pedimos o alguna de las partes renuncia». «Es la insistencia y la persistencia la que tenemos que tener siempre de divisa. Diría que todos los conflictos del mundo que se han resuelto se han hecho con mediación», ha añadido.

Por su parte, Mas ha asegurado que el soberanismo y el independentista tienen que aprovechar las próximas elecciones en el Parlamentpara «ampliar su mayoría y «si cada vez es más amplía la mediación internacional cada día estará más próxima», ha dicho.

Llegar al 50% en las urnas

En este sentido, los tres han reivindicado la necesidad de que el independentismo supere la barrera del 50% en las urnas para conseguir ser escuchado por todas partes. Puigdemont, ha afirmado que al independentismo no le tieneque dar miedo llegar al 50% de los votos. «Esalo único que no le tiene que asustar y creo que tiene que encontrar una respuesta igual de coral a la del 1-O», ha dicho. «¿O haremos lo mismo que cuando éramos el 47,5%?, se ha preguntado el expresidente.

«Escépticos» con la mesa de diálogo

Por otra parte, los tres se han mostrado escépticos con la mesa de diálogo con el estado español y ha asegurado que es necesaria pero que no confían en que tenga resultados. De hecho, Puigdemont ha asegurado que «Cataluña tiene menos competencias» ahora que antes que se crearala mesa. Mas, en cambio, ha dicho que «para resolver el problema real hace falta el ejercicio de autodeterminación, que parece muy lejos».

Expectación en las puertas de la Casa de la Generalitat

Torra, Puigdemont y Mas han llegado en vehículos separados hacia las once de la mañana. El primero enhacerlo ha sido el expresidente Artur Mas. Posteriormente, lo ha hecho Quim Torra y Carles Puigdemont, que se ha encontrado con Torra y han entrado los dos juntos a pie al edificio de la Casa de la Generalitat. En el exterior los esperaban una decena de personas a gritos de presidentes y varios cargos electos.