Vergés hace un llamamiento a «no bajar la guardia» porque todavía estamos lejos de la situación «óptima»
Sàmper asegura que se va «por el buen camino» y celebra que las restricciones están teniendo los resultados esperados
Vergés, que ha dado un repaso a los últimos datos epidemiológicos y ha constatado que hay «una clara tendencia a la baja», ha insistido en que se demuestra que ya se ha podido doblar la curva después de que el 6 de noviembre asegurara que ya se había pasado el pico de contagios. «Hemos tomado las medidas para poder parar la segunda ola y lo hemos hecho», ha defendido.
La consellera de Salutha remarcado que aunque la situación ahora es mejor respectohace tres semanas, las cifras no han mejorado tanto como cuando se inició la reanudación en verano. En este sentido, ha subrayado que mientras que entonces el riesgo de rebroteera de 14 y había 530 casos confirmados, ahora es de 290 y hay 16.312. «La diferencia es muy clara», ha dicho, y ha pedido mantener las precauciones.
Vergés también ha celebrado que se ha podido superar el pico de la segunda ola prácticamente sin detener la actividad y ha puesto en valor el hecho de que las escuelas hayan estado abiertas desde el inicio de curso, hecho que ha señalado que no se ha dado en otros países. La consellera también ha recordado que se ha hecho «mejoras estructurales» al sistema de Salutcon el aumento de camas de UCI hasta los 900 y con la incorporación de cerca de 3.300 profesionales enla atención primaria desde el mes de marzo hasta septiembre.
En vista de la mejora en los datos, Vergés ha dicho que hay que avanzar en la flexibilización de las restricciones para garantizar «un equilibrio» entre la salud y la «vitalidad» del país, pero aunque ha asegurado que «ya va de bajada» ha avisado de que todavía queda «mucho trabajo por hacer».
«Últimos flecos» del plan de desescalada
En plena polémica por las filtraciones del borrador del plan de desescalada, Aragonès ha apuntado que de momento «todos» los consellers están trabajando para acabar de diseñar la flexibilización de las medidas. El vicepresidente con funciones de presidente ha asegurado que están cerrando «los últimos flecos» de la estrategia pero ha remarcado que la flexibilización «será más lenta de lo que todo el mundo querría».
«La experiencia de la primavera y del verano desaconseja una desescalada acelerada», ha recordado, y ha dicho que irán «paso a paso» por si hace falta «moderar o incluso dar un paso atrás». Con todo, ha pedido primero consolidar la buena tendencia y no dar «pasos en falso porquerer correr demasiado».
Denuncias y disminución de la movilidad
Durante su intervención, Sàmper ha detallado que desde el 16 de octubre y hasta el 16 de noviembre ha habido 31.044 denuncias administrativas por incumplimiento de las restricciones (14.284 de los Mossos y 16.760 de policías locales) y se ha hecho 69.493 identificaciones (13.168 de los Mossos y 56.325 de policías locales). Durante la segunda ola se han cerrado 549 establecimientos.
Además, ha desmentido que a raíz de la pandemia haya más inseguridad en Cataluña y ha dicho que ahora mismo hay una media de 1.247 delitos al país al día, unos 500 menos de lo que era habitual. Con respecto a hurtos, en noviembre del 2019 había una media diaria de 583 y ahora son 310, prácticamente la mitad.
El conseller de Interior también ha celebrado el cumplimiento de las restricciones de movilidad por parte de la ciudadanía. Aunque ha admitido que ahora ha aumentado la movilidad los jueves –cuándo empieza de facto el confinamiento perimetral de fin de semana por el toque de queda de la noche- ha señalado que no es «preocupante» por la fuerte bajada que están los fines de semana. A modo de ejemplo, ha dicho que los viernes la disminución de la movilidad en el área metropolitana es de un 40%, los sábados de un 80% y los domingos de un 85%.