La restauración podrá abrir el lunes hasta las 21.30 sin límite de aforo en terrazas

Entre los indicadores que se tendrán en cuenta está la velocidad de propagación o contagio (Rt), que idealmente tendrá que situarse por debajo del 0,9. También hará falta la reducción o estabilización de los ingresos semanales.

Primer tramo: reapertura de la restauración y la cultura

La consellera de la Presidencia ha sido la encargada de explicar los diferentes tramos. En el primero, que empezará el próximo lunes, 23 de noviembre, una de las principales novedades es que permitirá la reapertura del sector de la restauración entre las 6h y las 21.30h con un aforo del 100% en las terrazas y del 30% en el interior, siempre en mesas de grupos de cuatro personas situadas a dos metros de distancia entre grupos diferentes. Podrán ser más si forman parte de la misma burbuja.

También podrán reabrir cines, teatros y auditorios y salas de concierto hasta el 50% del aforo y siempre con un tope máximo de 500 personas. La capacidad del 50% también se aplicará a museos, bibliotecas y salas de exposición.

Los equipamientos deportivos al aire libre podrán reabrir a un 50% de capacidad mientras que espacios cerrados como pabellones o gimnasios podrán hacerlo con un aforo máximo del 30% con cita previa y sin la posibilidad de utilizar los vestuarios, exceptuando el caso de los usuarios de la piscina.

El comercio se mantiene con la limitación del 30% de aforo. Los establecimientos de más de 800 metros cuadrados pueden utilizar todo su espacio de venta. Las actividades extraescolares no deportivas se podrán hacer con un máximo de seis personas.

Segundo tramo: del confinamiento municipal de fin de semana en el comarcal

Una de las principales novedades en el segundo tramo es que el confinamiento restringido al municipio de 6 de la mañana del viernes en 6 de la mañana del lunes se ampliará en el ámbito comarcal. Es decir, que durante el fin de semana la movilidad se ampliará y se podrá circular por dentro de la misma comarca.

Los centros comerciales podrán abrir con una capacidad máxima del 30%, y el pequeño comercio al 50. También se aumenta la capacidad máxima en el interior de los equipamientos deportivos (50%); en|a cines, teatros y auditorios (70%) y en el interior de bares y restaurantes (50%).

Tercer tramo: movilidad libre y reuniones de 10

En el tercer tramo la movilidad ya será libre porque dejará de estar vigente la restricción de movilidad durante el fin de semana (ceñida en el ámbito comarcal en el segundo tramo) y se levantará el confinamiento perimetral en Cataluña, todavía vigente en el primero y el segundo tramo. Ahora bien, se mantendrá el toque de queda nocturno entre las 22h y las 6h, que también seguirá vigente en el cuarto tramo.

Otra novedad es que por primera vez se aumentará el número máximo de personas que se pueden reunir, que pasará de seis a diez (dos burbujas de convivencia habitual o una ampliada).

Por otra parte, sigue aumentando progresivamente el aforo máximo en algunos sectores. Por ejemplo, en museos, bibliotecas y salas de exposición (70%); equipamientos deportivos en el exterior (70%) y actos religiosos (50%).

Cuarto tramo: devuelven en el aula bachillerato y ciclos formativos

En el cuarto tramo el principal cambio afectará al sector educativo. Los alumnos de bachillerato y ciclos formativos podrán volver a la presencialidad. Por el contrario, los alumnos universitarios seguirán dando a las clases virtuales durante los cuatro tramos de la desescalada.

Otro cambio es que se permitirán las actividades extraescolares sin el máximo de seis personas. También se reactiva la educación en el ocio. Además, se reanudan las competiciones deportivas.

En todo momento y durante los cuatro tramos previstos se mantendrá siempre el toque de queda nocturno entre las 22h y las 6h así como las indicaciones de teletrabajo. Ahora bien, las entradas culturales servirán como salvoconducto para llegar a casa a las 23 horas, y también podrá salir de los límites territoriales fijados en cada tramo.

Aragonés: «No se un plan para recuperar la normalidad»

El vicepresidente con funciones de presidente del Govern, Pere Aragonès, ha explicado que el nuevo plan prevé un horizonte de dos meses que permitirá «avanzar con total seguridad» e ir revisando si hay que moderar el proceso. Ha asegurado que se va «por el buen camino» y ha celebrado que «gracias al esfuerzo de todo el mundo» se puedan empezar a flexibilizar las restricciones.

Sin embargo, Aragonès ha remarcado que «no es un plan|plano para recuperar la normalidad» y ha insistido en que la situación no es la misma que la de la primavera. De hecho, ha admitido que en la desescalada de junio «fueron demasiado rápido», y ha dicho que probablemente eso ha hecho que la segunda ola «llegara antes» a Cataluña.

Con todo, ha subrayado que el equilibrio perfecto no existe, y ha apuntado que con cada medida de flexibilización que se adopta «se asume un riesgo epidemiológico mayor». En este sentido, ha recordado que la situación «sigue siendo muy grave», y ha pedido responsabilidad a pesar de la flexibilización. «Si vamos demasiado deprisa o asumimos un riesgo demasiado alto la pandemia nos volverá a pasar por encima», ha advertido.

Posible aplicación asimétrica

Por este motivo Aragonés ha hecho un llamamiento a «no bajar la guardia ni un instante». «Hasta que a pesar de todo no esté protegido, aquí no hay nadie salvado», ha avisado. En relación en el plan, el vicepresidente ha dicho que «en ningún caso» se plantean acelerar los tempos, y ha remarcado que el paso de un tramo en otro tendrá que ser siempre con un mínimo 15 días. Sí que se podría dar el caso de que algún territorio no pudiera saltar de fase de acuerdo con los indicadores epidemiológicos, y en caso de que fuera necesario se podría llegar a retroceder de tramo.

También Budó se ha referido a esta cuestión. La consellera ha asegurado que las medidas previstas en los diferentes tramos serán efectivas en toda Cataluña a partir del lunes, sin distinciones, y ha asegurado que al Govern le gustaría seguir avanzando de forma «simultánea y simétrica» al conjunto del territorio. Con todo, también ha abierto la puerta a avanzar de un tramo al otro por zonas en función de como evoluciona la epidemia a nivel territorial. «Si los datos marcan que unos territorios tienen más afectación, nos plantearíamos los tramos de reapertura de forma asimétrica», ha matizado. Así, ha insistido en que si bien la voluntad es avanzar al mismo tiempo también ha admitido la posibilidad de hacerlo de manera territorializada si no es posible al conjunto de Cataluña.

Restricciones para Navidad

Según el plan de desescalada, el 21 de diciembre se levantará el confinamiento perimetral de Cataluña y el confinamiento de fines de semana, y se podrán hacer reuniones de hasta 10 personas -siempre que los criterios epidemiológicos así lo aconsejen-, pero se mantendrá el toque de queda nocturno. En este sentido, el vicepresidente ha adelantado que de cara a la próxima semana tienen previsto estudiar «días puntuales» de las vacaciones de Navidad por si hicieran falta «medidas específicas». Según ha explicado, estas «excepciones» se recogerán en las resoluciones de cara al segundo y tercero tramo de la desescalada.

Sin embargo, Budó ya ha avisado de que el toque de queda se mantendrá por Fin de Año porque «es una medida que permite parar la movilidad y hacer una lucha más efectiva contra la pandemia». La portavoz del Govern ha recordado que «no es un año normal», y, por lo tanto, «no se podrá hacer un Fin de Año normal». «Eso no quiere decir que no podamos hacer celebraciones, pero tendrán que ser diferentes porque nos jugamos mucho», ha apuntado.

Al ser preguntado por la posibilidad de imponer sanciones si no se cumplen estas restricciones durante la Navidad, Aragonès ha dicho que «no se podrá poner un policía en cada casa», y ha pedido «responsabilidad individual y colectiva».