Los ERTE suavizan la caída del empleo en las pymes industriales

En conjunto, el empleo ha caído un 2%. Enlas micro y pequeñas empresas, el impacto ha sido de un 4%, mientras que en las medias, la reducción ha sido del 0,2%. En cualquier caso, estas cifras han sido «matizadas» por la existencia de medidas de apoyo al mantenimiento de puestos de trabajo, como los ERTE.

Por otra parte, un 21% de las empresas ha aumentado su facturación en el 2020, de mediaun 13,4%. Esta cifra contrasta con el 64% de las compañías que ha reducido los ingresos, con un 22,1% por término medio. De esta manera, la disminución de las ventas globales del sector industrial ha sido de un 11,4% en términos corrientes.

Las exportaciones de la pyme industrial han sido afectadas por el impacto de la pandemia en los mercados internacionales. Un 34% de las empresas han incrementado las exportaciones; un 24% las han mantenido, y un 42% las han disminuido.

La actividad inversora, en cambio, ha sido menos afectada por la pandemia de lo que se podía prever. Un 67% de las empresas del sector industrial ha hecho inversiones. Esta cifra es inferior al 72% registrado en el 2019, pero va en línea con el dato de 2018. El principal objetivo de las inversiones ha sido aumentar la capacidad productiva (un 54% de las empresas), seguido de un aumento de la productividad (un 50%).

«La inversión en el aumento de la capacidad productiva implica que hay una visión de futuro. La inversión en aumento de la productividad permite una lectura más defensiva y puede ser por la necesidad de reajustar los procesos a las capacidades del mercado», ha asegurado el director del Observatorio de la PIMEC, Modesto Guinjoan.

En general, sólo un 29% de las pymes industriales ha registrado un mejor resultado en el 2020 con respecto al año anterior, un 16% se ha quedado igual, y un 54% ha tenido unos resultados inferiores. Por dimensiones de empresa, el mejor comportamiento lo han registrado las medianas empresas, mientras que las micro han compatibilizado los «peores» resultados de todas las pymes.

Para el 2021, las compañías del sector tienen una visión «optimista». Un 59% prevé un aumento de la actividad, mientras que un 9% estima una disminución de los ingresos. Por otra parte, sólo un 5% prevén reducir las exportaciones, y un 14% estima una inversión inferior a la de 2020. Dos terceras partes de las empresas no prevén cambios en el número de personas ocupadas. Un 24% prevé un incremento de la plantilla y un 9% una disminución, con un saldo negativo del 15%. En cualquier caso, la patronal advierte que estas estimaciones son «volátiles» y podrían cambiar en función de la evolución de la pandemia.

Con respecto a los fondos europeos, un 62% conoce la existencia, pero sólo un 30% prevé presentar proyectas. PIMEC lo ha valorado de una manera «positiva», ya que demuestra la necesidad de encontrar salidas en un momento de crisis, pero también es un indicador de «viabilidad empresarial». «Hay ideas y proyectos que encajan en el perfil del patrón que pide los fondos europeos», ha afirmado Guinjoan.

De las empresas que tienen previsto presentar proyectos, la mayoría (un 58%) se destinarán al ámbito de la digitalización, un 20% a transición ecológica y un 22% a los dos ámbitos. «El Gobierno tiene que extremar la sensibilidad para hacer llegar estos fondos a las pymes», ha asegurado el presidente de la patronal, Josep González.

«Los fondos europeos tienen que ser la gran oportunidad del 2021, no sólo para curar las heridas, sino también para reactivar la economía», ha añadido. En este sentido, el presidente de la patronal también ha reclamado «potenciar» la vacunación de la población para reactivar la actividad y poder recuperar el turismo.