Gritos y cláxones en Ripoll contra Vox después de haberse referido a la ciudad como «cuna del yihadismo»

Vecinos de Ripoll han recibido este martes a la comitiva de Vox con carteles, cláxones y gritos de «fuera fascistas de nuestros pueblos». Tanto el candidato a la Generalitat, Ignacio Garriga, como la presidenta del partido en Madrid, Rocío Monasterio, se han referido a la ciudad como «cuna del yihadismo». Vox ha aprovechado la visita al municipio donde vivía el imán acusado de los atentados del 17-A para volver a vincular Ripoll con el terrorismo, y la inmigración con el «totalitarismo del Islam». Después de los parlamentos, la comitiva de Vox, por primera vez esta campaña, ha caminado por las calles del municipio. El objetivo era llegar hasta la mezquita para hacerse la foto. Lo han conseguido, seguidos por grupos de antifascistas y custodiados por los Mossos.

Un grupo de antifascistas ha vuelto a recibir a la comitiva de Vox, esta vez en la plaza del Ayuntamiento Ripoll, y, nuevamente, los Mossos han hecho un cordón policial para evitar que llegaran hasta el grupo de extrema derecha. Aunque los manifestantes han reivindicado su derecho de estar en la plaza, los agentes los han hecho retroceder hasta la acera del otro lado de la calle.

Garriga ha vuelto a denunciar la «creciente islamización de Catalunya, desde la cuna del yihadismo,» ha dicho, y ha insistido en denunciar la «permisividad del resto de partidos con el islamismo radical» que, asegura, está instalado en Ripoll, sin aportar, sin embargo, datos ni hechos objetivables que demuestren una preocupación real al municipio por la presencia de fenómenos próximos al yihadismo y sin que ninguna institución o cuerpo policial haya puesto nunca Ripoll como ejemplo de este extremo.

Por su parte, Rocío Monastrio, ha lamentado que «sólo se oiga hablar de Ripoll relacionándola con los enemigos de la libertad», mientras ella misma ha insistido en relacionar el municipio con el terrorismo y con el imán que «instigó a los suyos para cometer el terrible atentado del 17-A». Monasterio, incluso ha ido más allá y ha afirmado que Vox había venido al municipio «para defender el derecho de las mujeres a caminar por las calles de Ripoll sin tener que ponerse un burka», dando a entender que era habitual y que si no se hace nada, acabará siendo una realidad.