Sociedad
Los padres de la familia ocupa de la calle Còdols consiguen reunirse con los hijos después de más de 50 horas
Tres vecinos impedían a los progenitores entrar en el inmueble, donde había los dos niños, aduciendo que no se puede vivir allí
Mossos d'Esquadra y servicios sociales han seguido negociando con los vecinos mientras desde la plataforma Resistim al Gòtic no se descartaba denunciarlos a la fiscalía por coacciones. Varios vecinos habían denunciado a la policía la ocupación del piso que, según la plataforma, se encontraba vacío y es propiedad del fondo Cerberus.
Los Mossos d'Esquadra intervinieron ante la denuncia de los vecinos e intentaron desalojar a la familia pero el desahucio se detuvo por la presión de varios vecinos y activistas que, contrariamente a los que habían llamado a la policía, querían evitar que la familia se quedara en la calle.
Después de algunos enfrentamientos, el desalojo no tuvo éxito y no se produjo. Con todo, según explica Resistim al Gòtic, la pareja tuvo que ir a comisaría con los Mossos aquella misma noche del martes por la denuncia de ocupación. Se llevaron con ellos a la hija pequeña y los otros dos hijos, más mayores pero también menores de edad, se quedaron en el domicilio con una activista de la plataforma.
Al volver al domicilio para reencontrarse con los otros dos hijos, sin embargo, se encontraron la puerta de abajo cerrada con llave y un grupo de vecinos que no les dejaba acceder.
Así, las dos últimas noches han tenido que dormir separados de dos de sus hijos. Algún vecino del Gótico ha acogido temporalmente a los padres mientras que en la finca de la calle Còdols algunos vecinos seguían impidiéndoles el acceso.
Durante todo el miércoles, Resistim al Gòtic requirió la presencia de los Mossos para mediar y también estuvieron presentes representantes del distrito, para desescalar la tensión producida por la situación.
Preacuerdo
Tanto Mossos como Resistim al Gòtic coinciden en el hecho de que el miércoles por la noche se llegó a un preacuerdo para que la pareja pudiera volver a su domicilio. Según ha detallado la plataforma, los vecinos que se oponían permitirían a la pareja volver al piso si un informe técnico avalaba que no había riesgos para el inmueble, de estructura o de suministros, y que el piso se encontraba en buenas condiciones.
La revisión se ha hecho este jueves por la mañana por parte de técnicos municipales, que han hecho un informe favorable. Con todo, insisten miembros de la plataforma, tres vecinos han seguido mostrando resistencia y han requerido una copia del informe.
El Ayuntamiento de Barcelona, en conversación con el de Badalona
Desde el Ayuntamiento de Barcelona señalan que tratarán de ofrecer recursos de alojamiento provisionales y, en paralelo, estambre en conversaciones con Badalona para «exigir una solución para la familia», ya que es una familia que fue desahuciada en Badalona y está arraigada en aquella población.