Sociedad
El ocio nocturno prevé un fin de semana plagat de «botellones» y fiestas ilegales
Desde FECASARM anuncian que están estudiando llevar la nueva resolución al TSJC
La Federación Catalana de Asociaciones de Actividades de Restauración y Musicales (FECASARM) prevé un fin de semana con un gran incremento de los botellones y las fiestas ilegales.
Así lo ha anunciado la FECASARM en un comunicado después que el Tribunal Superior de Justicia de Cataluña (TSJC) limitara el toque de queda nocturno a 19 municipios de los 148 para los cuales la Generalitat lo había solicitado, pero que ha mantenido el horario de cierre de las actividades de ocio nocturno a las 00:30.
Además, desde FECASARM anuncian que están estudiando llevar la nueva resolución al TSJC.
«Nos parece una restricción desproporcionada e injustificada y que provocará un perjuicio irreparable en el sector y problemas de convivencia, salud, seguridad y orden público», afirman en el comunicado.
El secretario general de la FECASARM, Joaquim Boadas, ha dicho que se sienten «indignados» y «desamparados» con la forma de actuar de la Generalitat y ha recordado al conseller de Salud, Josep Maria Argimon, que pronto llevarán dos meses cerrados pese a que les dijeron que serían 15 días y aún están esperando «una explicación al respecto».
El presidente de la Asociación de Restauración y Ocio Nocturno de Salou y de la Asociación Provincial de Restauración y Ocio Nocturno de Tarragona, Eduardo Abenójar, exige a la Generalitat «una rectificación inmediata de los horarios de las actividades recreativas musicales y pactar un calendario de desescalada».
Afirma también que la única fórmula para reducir los botellones y las fiestas ilegales es «ir reabriendo de forma progresiva el ocio nocturno» siguiendo medidas como protocolos de acceso en los espacios interiores y ampliando los horarios de las actividades al aire libre.
Desde la federación insisten en que sus advertencias a los Departamentos de Interior y de Salud no han servido de nada y han ignorado la propuesta de los locales de ocio nocturno «como la única fórmula para rebajar la incidencia de botellones y fiestas ilegales».