Los macrobotellones avivan el debate sobre la reapertura del ocio nocturno
Estos sucesos se están extendiendo por todo el territorio de forma incontrolable para los cuerpos policiales
La proliferación de botellones, como el celebrado este fin de semana en el campus de la UAB, con 8.000 participantes y numerosos incidentes, ha avivado el debate sobre la conveniencia de reabrir el ocio nocturno en Cataluña, una opción que hace tiempo que reclama el sector y que apoyan el departamento de Interior y la alcaldesa de Barcelona.
El macrobotellón de la UAB tuvo lugar la madrugada del sábado y se saldó con peleas, robos, destrozos, asaltos a algunos pisos de estudiantes del campus y una denuncia por violación de una joven de 18 años.
Este fin de semana, no obstante, se han celebrado fiestas ilegales en otras localidades catalanas, como en Tarragona, donde un joven de 21 años resultó herido leve por arma blanca durante una pelea entre dos grupos de amigos mientras participaban en un botellón en el aparcamiento del cementerio del municipio.
Este tipo de fiestas no autorizadas, muchas de ellas convocadas a través de las redes sociales, es un hecho cada vez más habitual en toda Cataluña, pese a las restricciones que siguen vigentes a causa de la pandemia de coronavirus y que mantienen cerrados desde hace más de un año los locales de ocio nocturno.
El conseller de Interior, Joan Ignasi Elena, ha reconocido hoy que la reapertura de discotecas y bares musicales ayudará a gestionar desde su departamento el desarrollo de los botellones.
Elena, en declaraciones al canal de noticias 3/24, ha afirmado: «A nosotros nos gustaría que se reabriera el ocio nocturno cuando las cifras sanitarias digan que se puede hacer. Cuando se pueda hacer, cuando sea posible desde el punto de vista sanitario, para no hacer más mal que bien».
«Ahora bien -ha objetado-, y lo decimos claramente, en Madrid y en otros lugares de Europa, el ocio nocturno está abierto, y anteanoche hubo una fiesta (en la Ciudad Universitaria de Madrid) de 25.000 personas».
La alcaldesa de Barcelona, Ada Colau, ha vuelto a pedir la reapertura del ocio nocturno antes de las fiestas de la Mercè, que empiezan este viernes.
«Pedimos que se estudie abrir de alguna manera el ocio nocturno. Evidentemente, cumpliendo con los protocolos que sean necesarios y con las garantías sanitarias que den seguridad a todo el mundo y con lo que diga la Generalitat, que es la autoridad competente en este tema», afirma Colau en una entrevista en El Periódico de Catalunya.
«Nosotros creemos que hay que estudiar esta apertura del ocio nocturno porque es lo que permitiría descongestionar un poco toda el área metropolitana y que no haya el efecto llamada de La Mercè», incide la alcaldesa.
Sin polemizar sobre las medidas sanitarias, Ada Colau recuerda que ya se ha eliminado el límite nocturno de horarios, se ha suprimido la restricción de 10 personas en las reuniones sociales y más del 70 por ciento de la población está vacunada.
La alcaldesa considera que hay tiempo de tomar esta decisión durante la semana y asegura que el ocio nocturno puede ser una alternativa con garantías a las fiestas en la calle sin ningún tipo de control.
En opinión del secretario general de la Federación Catalana de Asociaciones de Actividades de Restauración y Musicales (Fecasarm), Joaquim Boadas, ha sido la Generalitat la que, con sus decisiones de los últimos meses, «ha fomentado los botellones».
En declaraciones a EFE, Boadas ha lamentado que la Generalitat «haya jugado siempre» a sus espaldas, «lo que ha comportado tener el escenario que tenemos por su culpa».
«Aunque digan que no querían fomentar los botellones, cuando levantaron la prohibición de limitar a diez personas las reuniones sociales ya sabían que los fomentaban, igual que las fiestas privadas, llegando a un momento que es mucho más que grave», ha declarado.
El empresario considera que se ha llegado a una situación incontrolable e irreconducible», ya que «muchos jóvenes se han acostumbrado a los botellones y algunos de ellos ni tan solo han vivido el sector legal, porque han llegado a la mayoría de edad durante la pandemia, sin los locales de ocio abiertos».
El secretario general de la Federación Catalana de Locales de Ocio Nocturno (Fecalon), Fernando Martínez, ha lamentado en declaraciones a EFE los últimos sucesos relacionados con los botellones en Cataluña y ha coincidido con Boadas en que ya se avisó hace tiempo de que el botellón «era un fenómeno que ha llegado para quedarse».
En su opinión, «la única manera de solucionar la actual situación es que haya una apertura progresiva del ocio nocturno, porque toda la política llevada a cabo durante años encarada a un consumo responsable se está tirando por la borda».
En tiempo de pandemia, además, los botellones «tienen una incidencia sanitaria porque los asistentes van sin mascarilla y sin tener en cuenta la distancia de seguridad. Las administraciones deberían hacer un ejercicio de transparencia y decirnos su incidencia sanitaria».
A la vez, ha subrayado que suponen un «coste y un impacto económico brutal para la ciudadanía en tiempo de crisis, puesto que comportan dispositivos policiales y de brigadas de limpieza».
Entiende que el conseller Joan Ignasi Elena hoy «viene a lo que el sector ha ido diciendo desde hace meses» y ha remarcado que en la reunión que mantendrán el jueves con la Generalitat volverán a pedir que los locales de ocio nocturno puedan abrir «de forma inmediata».