El Govern fija cuarentenas de 14 días para blindar residencias de la ómicron
En caso de brote de esta variante, usuarios y trabajadores afectados tendrán que hacer esta cuarentena aunque estén vacunados
La residencia de la Mercè sufre un brote de sarna con cuatro afectados
La Generalitat ha actualizado el protocolo para las residencias y ha establecido que, en caso de brote de variante ómicron del coronavirus, usuarios y trabajadores afectados, indistintamente de su estado vacunal, tendrán que guardar una cuarentena de 14 días.
Los departamentos de Drets Socials i Salut han adaptado el documento de medidas de mitigación en el ámbito de residencias de personas mayores, de personas con discapacidad y centros de día para minimizar el impacto de la sexta ola, así como para prevenir la posibilidad de entrada de la nueva variante ómicron.
El nuevo protocolo refuerza las directrices internas de prevención y control de infecciones, especialmente en espacios comunes, y se evita la asistencia de profesionales a sesiones, congresos o reuniones presenciales.
Las residencias mantienen el régimen de visitas y de salidas de los usuarios, pero se adaptan las condiciones.
Las residencias clasificadas como verdes y naranjas, en las cuales no hay contagios o un adecuado sistema de separación de espacios, los visitantes tendrán que mostrar el certificado covid para acceder al centro y, si no lo tienen, se tendrán que someter a un test de antígenos rápido.
El protocolo incorpora una nueva medida en caso de brote de variante ómicron: tanto los trabajadores vacunados como los que no hayan sido contacto estrecho tendrán que hacer cuarentena de 14 días en su domicilio.
El mismo procedimiento se aplicará en aquellos usuarios considerados contactos estrechos, que tendrán que confinarse en una habitación individual.
La nueva versión del protocolo aumenta la frecuencia de los cribados a profesionales, voluntarios y alumnos en prácticas en todas las residencias y centros de día.
En esta nueva fase, las personas vacunadas se someten a un test de antígenos a la semana y las personas no vacunadas, dos a la semana (uno de estos tiene que ser una PCR).