El comité científico asesor de Salut no descarta «un confinamiento de duración corta» en el peor de los escenarios
Los expertos proponían cerrar los interiores de la restauración y limitar la apertura de los comercios no esenciales
El 10% de la población catalana tiene la pauta completa de la vacuna contra la covid-19
El comité científico asesor de Salut no descarta «un confinamiento de duración corta» en el peor de los escenarios, tal «como están haciendo otros países de Europa». Esta es una de las conclusiones del último informe que presentó el lunes pasado al Govern. Así, en caso de que las medidas propuestas «no fueran lo bastante efectivas», esta sería una de las propuestas si la transmisión comunitaria estuviera descontrolada y excediera las capacidades de respuesta del sistema sanitario. En el escenario actual, los expertos apostaban por una serie de recomendaciones muy claras: aplicar más restricciones, acelerar la vacunación de terceras dosis, ampliar el uso del pasaporte covid, facilitar el acceso a los TA y revisar la cuarentena de los contactos estrechos.
En el texto se avisa de la rápida extensión de la variante ómicrona escala mundial, afirmando que es mucho más contagiosa que la variante delta. Un hecho que, los profesionales sostienen, hace prever que antes de finales de año será la predominante, fijando los nuevos casos diarios en más de 25.000 en enero del 2022 con un impacto «muy elevado sobre el número de hospitalizaciones».
Por eso, los expertos proponían una serie de medidas, en general más duras que las que se acabaron poniendo finalmente sobre la mesa ayer al atardecer, como es el caso de la reducción de aforos, el cierre del ocio nocturno, la limitación de reuniones a 10 personas o el toque de queda, algunas pendientes aún del aval del TSJC.
El comité veía efectivo reducir las reuniones en el ámbito público a un máximo de cuatro personas, limitar las reuniones en el ámbito privado solo a grupos de convivencia, favorecer turnos escalonados de trabajo, promover el transporte en bicicleta y/o andando, aumentar la frecuencia de horarios en el transporte público o evitar la presencia de más de dos pasajeros por fila de asientos en taxis yVTC. De hecho, recomendaba directamente a la población salir del domicilio solo por necesidad, o evitar viajar en horas punta excepto para hacer actividades esenciales.
En cuanto a las actividades consideradas de alto riesgo, el texto propone la suspensión del servicio en zonas interiores de los establecimientos de restauración, de actividades deportivas no profesionales o federadas en espacios interiores, de aquellas en zonas interiores de los locales de apuestas, bingos, salones recreativos y de juegos, el cierre del ocio nocturno y la reduccióń del aforo del exterior al 50% y limitacióń de horarios de servicio en hostelería y restauración.
En cuanto a las actividades consideradas de riesgo intermedio, los expertos consideraban adecuado una reducción del 50% del aforo en cines, teatros, auditorios, circos de carpa, bibliotecas, archivos, museos, salas de exposiciones, monumentos y otros centros culturales. El documento también recomienda la enseñanza a distancia en academias, autoescuelas y otros centros de enseñanza no reglada, limitar los horarios de apertura de los establecimientos comerciales no esenciales y cerrar las zonas comunes de hoteles, albergues y otros alojamientos turísticos.
Finalmente, el comité incidía especialmente en el diagnóstico de casos, de rastreo y seguimiento de contactos, pidiendo «reforzar la capacidad de monitorización molecular de las variantes viral». Los expertos, pero remarcaban la importancia de «redirigir la actividad burocrática a otros ámbitos administrativos para aprovechar al máximo la capacidad clínica, diagnóstica y vacunal de los profesionales de los equipos de atención primaria».