Las personas de más 40 años ya pueden pedir cita para vacunarse de la tercera dosis
La semana pasada se abrió la cita para los mayores de 50 años y los vacunados con AstraZeneca
La incidencia de covid-19 en Cataluña se mantiene «muy alta», con una especial afectación en la franja de 20 a 29 años, mientras que es menor en el grupo de mayores de 70 años, con una alta cobertura de la dosis de recuerdo, y de 60 a 69 años, con una cobertura intermedia.
Cabezas prevé que los casos seguirán subiendo en las próximas semanas, pero confía en que más adelante Cataluña acabe siguiendo la tendencia a la baja que han registrado países europeos que también han aplicado medidas poblacionales de contención de la nueva ola.
Ante esta predicción, la secretaria de Salut Pública ha expresado su confianza en que el curso escolar pueda reanudarse el próximo 10 de enero siguiendo los mismos protocolos vigentes hasta ahora.
Según Cabezas, los contagiados de ómicron tienen la probabilidad de ingresar «dividida por dos o más», y «dividida por tres» de acabar en la UCI. Con todo, la presión en los centros de atención primaria se ha disparado con respecto a olas anteriores. El lunes se registraron más de 61.000 consultas, y martes, 52.000, aunque la mayoría fueron por problemas «bastante banales».
En este sentido, la directora del CatSalut, Gemma Craywinckel, ha pedido a la población que sólo recurra a ayuda médica «cuando no se encuentre bien» con el fin de «preservar el sistema para aquellaspersonas que están enfermas».
Ante un resultado positivo por antígenos, si no hay síntomas o los síntomas son muy leves (con febrícula, es decir, que no se llega a los 38 grados de forma sostenida), Craywinckel ha recordado que hay que aislarse diez días en el domicilio para cortar la transmisión y hacer «autocuidado» para evitar colapsar los CAP. Eso sí, hay que contactar para comunicar el positivo, ha subrayado.
Con respecto a posibles «picarescas» de población que comunique un falso positivo para pedir la baja, la directora del CatSalut ha expresado que es «un riesgo que hace falta asumir» ante la actual explosión de casos. «No nos podemos permitir ni nosotros no fiarnos de la población, ni que la población confíe en el sistema», ha remachado.