Movilidad
Subir un patinete eléctrico al transporte público comportará sanciones de hasta 200 euros
La prohibición del ATM choca con las críticas de usuarios y empresas de movilidad
La prohibición temporal de seis meses para|por viajar con el patinete eléctrico al transporte público entrará en vigor este miércoles 1 de febrero después del incendio de uno de estos vehículos de movilidad personal en un vagón de FGC. El director general del ATM, Pere Torres, justifica la medida para «garantizar al máximo la seguridad de los usuarios» y porque este periodo supone un «tiempo razonable» paraestudiar como reducir el riesgo a cero. Durante este medio año, subir el patinete al transporte público puede comportar sanciones de 200 euros. En cambio, los usuarios y las empresas de movilidad lamentan esta prohibición. «Es una decisión demasiado contundente», critica a la directora de la Asociación de Empresas de Movilidad, Entorn Sostenible i Smart (AEMES), Neus Olea.
En Tarragona, la Autoridad Territorial de Movilidad (ATM) también ha optado por prohibir durante medio año el acceso de los patinetes eléctricos y otros vehículos eléctricos de movilidad personal a los autobuses del transporte público. En la misma línea que el ATM de Barcelona, estos meses se destinarán a estudiar las condiciones de uso y acceso al transporte público.
«No dejaremos fuera de la participación y reflexión nadie que pueda aportar algún aspecto o elemento que pueda ser de interés», se compromete Torres, que asegura que la prohibición no tendría que alargarse más allá de este periodo. «Si hiciera falta una prórroga, la haríamos, pero el propósito es que no se vuelva permanente», apunta. Mientras tanto, el ATM irá habilitando progresivamente espacios para estacionar los patinetes en las estaciones.
El objetivo final, reitera, es garantizar la seguridad. «Preservar la seguridad de las otras personas merece a veces actuaciones contundentes», argumenta el director general deATM, que recuerda que el incendio de un patinete en un vagón de FGC en noviembre pasado en Sant Boi de Llobregat tuvo lugar en una estación al aire libre, con poca gente y con las puertas del tren abiertas. «Situamos el mismo incidente en el mismo tren, lleno y en un túnel. Probablemente no estaríamos hablando de desperfectos y de dos heridos de poca consideración», añade.
Los usuarios ven el accidente de Sant Boi de Llobregat como un caso puntual
Desde la estación de Ferrocarriles de la Generalitat en Sant Cugat del Vallès, Cristina Leonelli explica que hace cinco años que se desplaza con patinete al trabajo y que a partir del miércoles lo tendrá que dejar de hacer y ahora tendrá que destinar más tiempo. «No estoy del todo a favor de la decisión porque la explosión de patinetes pasa de vez en cuando como con móviles y con patinetes trucados», señala.
Por su parte, Israel Carmona comenta a la ACN que utiliza con VMP para ir a Barcelona, dónde reside su madre. «Eso es unengañabobos porque tú llevas un móvil o un portátil con batería, y lo mismo que pasó con el patinete podría pasar con un móvil o un ordenador», opina.
Otro viajero de la compañía, Rómulo Orlando, comenta que pasará a utilizar una bicicleta. En la misma línea, atribuye al incendio a partir del cual se ha prohibido temporalmente el uso de los patinetes a un posible trucaje del vehículo. «No quiere decir que pase el mismo con todos», lamenta. «Habría que considerar hacer revisiones en patinetes, como la ITV para los coches, para asegurarse de que está en buenas condiciones», añade.
De la misma opinión es la directora de la Asociación de Empresas de Movilidad, Entorno Sostenible y Smart (AEMES), Neus Olea, que propone que los patinetes tengan que pasar una inspección técnica, junto con medidas «más smart», como por ejemplo habilitar un QR que certifique que se han superado estos controles.
La directora del AEMES pide al ATM que se replantee esta medida y opte por otras más concretas por minimizar el riesgo de otro incendio en el interior del transporte público. «Es una decisión que se ha tomado muy rápido, es demasiado contundente», se queja Olea, de que sospecha que el incendio en un convoy de noviembre de FGC en Sant Boi de Llobregat estuvo causado porque el patinete se estaba cargando. «Es muy extraño que en un patinete le pase eso si no está cargando», reitera a la directora de la asociación en declaraciones a la ACN. En cambio, ATM desmiente que en aquel momento estuviera conectado en la corriente.
Olea, además, propone apostar por los patinetes compartidos. Parala directiva del AEMES, serviría para tener un mayor control sobre estos vehículos de movilidad personal, estarían homologados y con la velocidad limitada, uno de los aspectos que más preocupan a los peatones, sostiene.
A pesar de la prohibición a subir los patinetes eléctricos en el transporte público del ATM, las empresas del sector no creen que se traduzca en un descenso de las ventas. «Si fuera a largo plazo sí», puntualiza Olea, que critica que la prohibición va en contra de los llamamientos a utilizar más el transporte público.