Las zonas de montaña rondarán el 90% de ocupación por Semana Santa

La poca nieve de las últimas semanas a las estaciones de esquí del Pirineo no impedirá que esta Semana Santa las zonas de montaña alcancen una ocupación de hasta el 90%, según los cálculos del Patronat de Turisme de la Diputació de Lleida. Coincidiendo con el final de temporada, la Cerdanya y el Ripollès esperan una ocupación un poco menor, del 80% a partir del Viernes Santo, de acuerdo con las previsiones de la Federació de Hosteleria de las comarcas de Girona. Por lo que hace a la costa, el sector turístico también se muestra optimista y desde la Costa Brava hasta la Costa Daurada y las Terres de l'Ebre, se espera que la ocupación oscile entre el 80% y el 90%. Por otra parte, el turismo rural rozará el pleno absoluto en las comarcas centrales.

El Patronat de Turisme de la Diputació de Lleida espera una ocupación turístico del 90% en las comarcas de Ponent y el Alt Pirineu y Arán durante la Semana Santa. Mayoritariamente se focalizará en la zona del Pirineu del Jueves Santo al Lunes de Pascua donde se prevé que se puedan combinar las actividades relacionadas con los deportes de aventura, pero también rematar la temporada de esquí a las estaciones que todavía están abiertas a pesar de las elevadas temperaturas de los últimos días y las pocas precipitaciones. Son Baqueira Beret, Boí Taüll, y Puerto Ainé que cuentan con grosores de nieve de calidad dura primavera. Espot Esquí ha intentado llegar a la Semana Santa pero finalmente, el calor y la falta de nieve ha anticipado el cierre el viernes.

A pesar de todo, las previsiones meteorológicas apuntan a la posibilidad de que el domingo caigan algunas nevadas a partir de la cota situada entre los 1.000 y 1.200 metros y que podrían permitir acumular algunos centímetros de nieve nueva.

La oferta de alojamiento para estos días será de unas 77.000 plazas, distribuidas entre las 55.000 unidades de turismo reglado entre hoteles, campings, casas rurales, albergues y refugios, a las cuales se tienen que sumar otras 22.000 plazas de apartamentos. También por estas fechas se prevé que la mayor parte de las segundas residencias de la demarcación, pero principalmente las del Pirineo, tengan también un nivel de empleo alto, lo cual influirá igualmente en el consumo, en el incremento del gasto en las zonas turísticas y en la contratación de servicios de turismo activo, esquí y actividades diversas al conjunto del territorio.