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Meteorología

El año 2022 ha sido el más cálido y el más seco para el conjunto de Cataluña desde 1950

La intensidad y duración de los periodos de sequía pluviométrica ha ido aumentando durante los últimos decenios

El meteoròelg Josep Pascual recull la corda d'una sonda que utilitza per mesurar la temperatura de l'aigua amb les illes Medes de fons.

El año 2022 ha sido el más cálido y el más seco para el conjunto de Cataluña desde 1950ACN

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El año 2022 ha sido el más cálido y el más seco para el conjunto de Cataluña, como mínimo, desde 1950. La temperatura media anual es actualmente 1,8 grados más alta que a mediados del siglo XX y la precipitación ha disminuido ligeramente, pero sin mostrar una tendencia concluyente.

Con respecto a la intensidad y la duración de los periodos de sequía pluviométrica, esta ha ido aumentando, mientras que la temperatura media anual del agua superficial del mar en el Estartit (Baix Empordà) durante el año pasado se situó en 18,3 grados, superando por primera vez desde 1974 – cuando se iniciaron los registros - los 18, tal como muestra la última información publicada por el Boletín Anual de Indicadores Climáticos (BAIC).

El Servicio Meteorológico de Cataluña (SMC) ha publicado una nueva edición de este boletín, que evalúa la evolución reciente del clima de Cataluña, a partir del análisis de diferentes indicadores de cambio y variabilidad climática. Como en las ediciones anteriores, el BAIC utiliza series climáticas de temperatura y precipitación de amplia cobertura temporal, a partir del estudio de 27 series de temperatura y 72 de precipitación que cubren el periodo que va desde 1950 al 2022.

El año pasado fue el año más cálido en Cataluña desde 1950, con una anomalía de 2,7 grados. En los últimos 73 años no se habían superado nunca los 2 grados de anomalía y se mantiene el claro predominio de años cálidos durante los últimos tres decenios, y los 10 años más cálidos en Cataluña desde 1950. Considerando los resultados, se ha calculado la variación de la temperatura respecto del periodo preindustrial (1850-1900).

El resultado obtenido es que, para el año 2022, la anomalía térmica en Cataluña respecto del periodo preindustrial ha sido de 2,4 grados en positivo, aproximadamente el doble del valor promedio obtenido para todo el planeta. Con respecto a la precipitación, el año pasado ha sido el más seco para el conjunto del territorio, con una anomalía de un 30,4% menos respecto de la media climática del periodo 1961-1990. Los 5 años más secos en Cataluña desde 1950 se han registrado en el periodo 2006-2022.

La evolución de los últimos años

Para el conjunto de Cataluña, y para el periodo estudiado (1950-2022), la temperatura media anual ha aumentado, y lo ha hecho a un ritmo de 0,25 grados por decenio, 1,8 grados en los últimos 73 años. Además, todas las estaciones del año presentan también una tendencia estadísticamente significativa hacia el aumento de la temperatura, más elevada en verano y menor en invierno.

Los meses de junio y agosto son los que más han notado el incremento térmico. El comportamiento de la precipitación no es tan evidente, y su valor promedio anual muestra una tendencia a la disminución (-1,9 %/decenio), pero es un valor sin significación estadística. La única estación del año con una tendencia estadísticamente significativa es el verano, con una clara disminución del 4,9% por decenio.

Otras variables analizadas

En el periodo 1974-2022, la temperatura del agua del mar en el Estartit (Baix Empordà) ha aumentado a un ritmo de 0,3 grados por decenio en los primeros 20 metros de profundidad y de 0,2 grados por decenio de 50 a 80 metros de profundidad. Durante el año 2022, la temperatura media anual del agua superficial en este punto del litoral ha sido de 18,3 grados, el valor más elevado desde 1974 y superando por primera vez el umbral de los 18 grados.

El nivel del mar en el mismo entorno geográfico ha aumentado en los últimos 33 años (1990-2022) a un ritmo de 3,0 centímetros por decenio, es decir, un total de 10 a 11. El BAIC también muestra por primera vez la evolución de determinados estadios fenológicos de plantas silvestres y de pájaros de primavera-verano. Por ejemplo, en estos últimos años, ya se ha apreciado un adelanto en la maduración de la almendra y un retraso en la fecha de la llegada del ruiseñor, en ambos casos un cambio estadísticamente significativo.

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