Los Mossos incorporan al cuerpo 800 nuevas cámaras unipersonales para registrar actuaciones con lanzadoras de 'foam' y Taser

El Departamento de Interior ha licitado un contrato para incorporar 800 nuevas cámaras unipersonales en el cuerpo de los Mossos d'Esquadra por valor de 1.097.470 euros. Los dispositivos se utilizarán para grabarsituaciones en que haya que utilizar las lanzaderas de proyectiles de 'foam' o las pistolas Taser. Según Interior, los aparatos materializan el requerimiento de la Comisión de Estudio sobre el Modelo Policial del Parlament de Catalunya con respecto a la trazabilidad en el uso de las lanzaderas. Al mismo tiempo permitirán retransmitir imágenes en directo y podrán posicionar mediante GPS. Aparte de las cámaras, la licitación del contrato incluye el software informático de gestión de los aparatos y un servicio de mantenimiento.

Las cámaras, o como dice Interior, los Dispositivos Personales de Grabación (DPG) se podrán utilizar ante la comisión de hechos delictivos, y también ante la comisión de infracciones administrativas graves o muy graves. Aparte, será obligatorio utilizarlas para grabar aquellas situaciones en que los policías tengan que utilizar las pistolas Taser.

Según ha explicado a la ACN el director general de la Policía, Pere Ferrer, la mayor parte de las 800 cámaras -tienen que llegar todas antes del 31 de diciembre- serán de nueva incorporación tanto a las unidades de orden público, Brimo y Arro, como a las de Seguridad Ciudadana, «que era una reclamación que a lo largo de los años habían hecho a muchas organizaciones sindicales». Será, ha añadido, «un elemento de mucha ayuda para los agentes para darles mejores garantías para poder hacer el ejercicio de sus funciones».

Precisamente, las primeras cámaras se incorporaron al cuerpo de los Mossos con la llegada de las pistolas Taser, que disparan cargas eléctricas de alto voltaje, a finales de junio del 2018. Hasta el 2022 se han adquirido 184 DPG, cifra que ahora experimentará un salto exponencial con la incorporación de los 800 aparatos nuevos.

Aparte, Interior asegura que era necesario ampliar el parque de DPG dado que algunos de los primeros modelos han quedado descatalogados y, en consecuencia, no tienen servicio técnico. En este sentido, el contrato que ahora se licita incluye también la compra de una plataforma informática que permitirá incorporar nuevos aparatos en el futuro para evitar obsolescencias técnicas no deseadas. También incluye 6.000 licencias digitales para poder abarcar las necesidades del cuerpo, según ha indicado Ferrer.

El director general de la Policía también ha explicado algunas de las ventajas de las nuevas cámaras, como la geolocalización o la transmisión de imágenes en directo en los centros de mando, de manera tal que los responsables de los dispositivos policiales tendrán más elementos para tomar sus decisiones.

Al mismo tiempo ha destacado el hecho que, de manera automática, las cámaras grabarán «el minuto, máximo dos minutos» previos al momento en que el policía que lleva el dispositivo aprieta el pivote de grabar.

«A veces, en una actuación policial, cuando el agente tiene que pulsar la cámara para empezar a grabar porque cree que la actuación puede ser compleja, los minutos antes pueden ser muy interesantes para contextualizar el porqué de aquella intervención», ha explicado Ferrer.

Por eso, una de las características que se piden al contrato de licitación «es que cuandoel agente apriete [el pivote de grabar], la cámara automáticamente grabey mantenga a la memoria el minuto, máximo dos minutos antes que el agente haya apretado. Por lo tanto, el agente aprieta cuando interpreta que el incidente está a punto de pasar, pero podremos tirar atrás y ver los momentos antes de la actuación policial», ha explicado Herrero.