Una refugiada participando del programa de acogida de Micropobles: «Es una nueva oportunidad para nuestra vida»

28 familias refugiadas han participado del programa Oportunitat500 impulsado por la Asociación de Micropueblos de Cataluña con el fin de acoger personas refugiadas en pueblos de menos de 500 habitantes. Se trata de una prueba piloto que empezó en octubre del 2022. Unas noventa de personas han tomado parte del programa, 47 de las cuales niños, provenientes de países como Colombia, Honduras, Marruecos o Ucrania.

Una de las participantes, Monica Ovalle, colombiana que llegó en el 2021 en Barcelona, ha explicado que instalarse en Pujalt (Anoia) ha sido una «nueva oportunidad para nuestra vida». Xavier Camps, de la sectorial de atención a las personas de Micropobles, ha destacado que excepto unas familias ucranianas, han alcanzado el 100% del acogimiento.

Monica Ovalle y Johnn Serna son pareja y huyeron de Colombia a raíz de un conflicto violento y se establecieron en Barcelona, en una habitación de un piso vivían ellos dos y sus dos hijos. Desde que están en Pujalt, Ovalle comenta que han ganado «independencia», sobre todo sus hijos, ya que cada uno tiene su habitación y un espacio para estudiar. También han ganado «seguridad y tranquilidad», señala ella. «Pau», añade Serna que ha conseguido un contrato de trabajo al ayuntamiento del mismo pueblo gracias al programa Oportunitat500.

Desde la Asociación de Micropueblos de Cataluña entrevistaron a 380 familias y finalmente se seleccionaron 28 que han sido acogidas por 44 municipios de Cataluña. Durante doce meses, cada uno de los ayuntamientos han ofrecido un contrato de trabajo a jornada completa subvencionado por el SOC y la colaboración del Departamento de Igualdad y Feminismos, además de facilitar un alquiler asequible a las familias. De todos los participantes, cinco personas han vuelto a Ucrania, mientras que ocho empezarán un nuevo trabajo pronto y once en los próximos meses. Por eso, desde la asociación trabajan ahora para prorrogar el programa un año más.

El responsable de atención a las personas de Micropueblos e ideólogo del programa, Xavier Camps, ha indicado que les ha servido para «generar confianza, ama|estima y con respecto a las personas participantes y al territorio», ya que hasta ahora el modelo era acogerlos en grandes ciudades como Barcelona, comenta. «Queríamos demostrar que en territorio también se puede hacer acogida», ha aseverado Camps. De hecho, el 36% de los participantes venían de Barcelona o de ciudades del área metropolitana. La alcaldesa de Senan (Conca de Barberà), Carme Ferrer, ha manifestado que muchas personas refugiadas llegan a grandes ciudades y acaban durmiendo a la intemperie. «En nuestros municipios nunca nadie vivirá en la calle ni pasará hambre», ha asegurado.

En Senan también han llegado tres personas refugiadas jóvenes. «Ha incrementado un 30% la población», ha exclamado la alcaldesa, ya que en el pueblo son una cincuentena de personas. «Supone vida, oportunidades, vitalidad. Se ha generado una vida en el municipio que antes no teníamos en este nivel», ha remarcado Ferrer.

Reproducir el modelo

Tanto Oriol López, coordinador de Oportunitat500, como Xavier Camps, han insistido en que es un modelo «reproducible». Han apuntado que es un modelo de acogida en el territorio para las políticas públicas y de hecho, han publicado un documento explicando todo el programa para que otras administraciones lo puedan implementar. Paralelamente, trabajan con el Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Refugiados (ACNUR) para difundir la iniciativa más allá de Cataluña.

La alcaldesa de Senan ha remarcado que se ha trabajado de manera «conjunta» entre las administraciones, «no se ha hecho desde un despacho de Barcelona», ha apuntado, teniendo en cuenta «las necesidades de los municipios y de los refugiados». Todos los responsables consideran que es un «modelo de éxito» y esperan que tenga continuidad.