Recuperado un manuscrito del siglo XVII inspirado en una leyenda de Montserrat que se vendía por internet

Los Mossos d'Esquadra han recuperado un manuscrito teatral del siglo XVII inspirado en la leyenda del fray Garí Montserrat que se vendía por internet. El documento, copiado de un original que se deslocalizó durante la Guerra del Francés, estaba en manos de un coleccionista particular. Aparte de este manuscrito, la propiedad vendía una cincuentena de documentos de interés histórico. Durante el año 2023, se han intervenido temporalmente un total de 51 documentos históricos, de los cuales 28 fueron depositados por su contenido y valor, de interés y de dominio público. Los Mossos han localizado también una cruz gótica sustraída de una parroquia de Sant Martí Sarroca a los años 80 valorada en 30.000 euros.

El manuscrito se consideró "raro", ya que no aparece citado en ninguno de los repertorios bibliográficos del siglo XVII y XVIII y su desaparición no fue denunciada. "Se trata de una pieza de gran interés para la historia del teatro catalán, porque no han sobrevivido demasiados testimonios de leyendas catalanas", ha indicado la cabeza de la Unidad Central de Patrimonio Histórico de los Mossos, José Luís González. La inscripción manuscrita del ejemplar vincula la obra y el autor, el jesuita P. Valentín Céspedes, con la Abadía de Montserrat, donde ha sido devuelta.

El coleccionista privado ofrecía también diferentes documentos antiguos de instituciones catalanas medievales, internos de ayuntamientos, de administraciones de carácter señorial y jurisdiccional, así como capbreus y eclesiásticos. El propietario alegaba en la misma descripción de los productos que podrían tratarse de documentos procedentes de archivos públicos. Aparte de documentos catalanes, también había procedentes de Murcia, Valladolid, Valencia y Baeza.

El 3 de febrero de 2023 se llevó a cabo una inspección policial al vendedor para determinar la autenticidad y la trazabilidad de los documentos. En una primera observación, los especialistas en patrimonio histórico detectaron que los documentos y libros intervenidos contenían elementos que hacían sospechar que se trataba de piezas de dominio público. Los elementos intervenidos no se encontraban en condiciones óptimas de conservación.

Según ha explicado de González, todo el inventario que tenía el investigado provenía de la herencia de un familiar que era coleccionista de antigüedades y que no disponía de documentaciones de compra para aportar la trazabilidad de estos, ni tampoco ningún libro de registro. "Era un fondo atípico porque era de un particular no especializado que había estado recopilando documentación durante 30 o 40 años", ha dicho el jefe de la unidad, que ha añadido que desconocen de dónde adquiría las piezas. "Es habitual que este tipo de herencias acaben subastadas o en una página de compraventa", ha señalado.

En el marco de la investigación se intervinieron temporalmente 51 documentos, 23 de los cuales fueron devueltos. Los 28 restantes han sido entregados en los archivos de donde procedían o se han depositado en bibliotecas acreditadas, donde se integrarán en su fondo patrimonial asegurando una óptima conservación.

La cruz procesionaria valorada en 30.000 euros, en subasta

Paralelamente, los agentes pusieron en marcha una investigación para recuperar una cruz gótica procesionaria del siglo XVI que había sido sustraída el año 1981 de la iglesia de Sant Maria de Sant Martí Sarroca (Barcelona). Los investigadores tuvieron conocimiento de la pieza a través del Obispado de Sant Feliu de Llobregat, que alertó que se exponía en una subasta una cruz con las mismas características de que la robada hace 42 años. El propietario había marcado un precio de salida de 10.000 euros pero los expertos afirman que la pieza está valorada en 30.000 euros.

La intervención de los Mossos permitió obtener la cruz unos días antes de que se llevara a cabo la subasta, analizarla y devolverla el pasado 10 de noviembre al obispado, después de que el responsable no pudiera acreditar su propiedad ni aportar documentos de compra.

González ha recordado que la Ley de Archivos 10/2001 especifica que cuando los titulares de documentos públicos tengan conocimiento de la existencia de documentos propios en posesión de terceros tienen que tomar las medidas legales pertinentes para recuperarlos, dado que los documentos públicos y los derechos de los que son titulares no prescriben.

Esta pieza fue sustraída hace más de cuarenta años en un robo con fuerza en que los ladrones robaron también otras piezas de alto valor histórico. Los autores de los hechos destruyeron las vallas de la puerta de entrada para acceder al interior y arrancaron la imagen del Sant Crist de marfil que presidía el altar mayor. También forzaron las puertas de la sacristía y se llevaron dos cruces procesionarias de plata, una románica del siglo XIV y una gótica del siglo XVI, en más de dos cálices de plata y dos relicarios.

La cabeza de la unidad ha destacado la importancia de disponer de una ficha de catalogación del patrimonio artístico o de cualquier pieza que tenga valor. "Vemos cada día robos y tener fotografías de las piezas y documentarlas es clave para recuperarlas", ha expresado. La Unidad Central de Patrimonio Histórico de los Mossos está formada por ocho agentes y actualmente tiene 34 casos abiertos. Aunque no ha habido un aumento de estos delitos, cada año la unidad detecta más casos en aplicaciones de compraventa como Wallapop o Todocolección.