Aragonès quiere que el referéndum pregunte por la independencia y abre la puerta a añadir «alguna otra propuesta»

El presidente de la Generalitat, Pere Aragonès, quiere que el referéndum pregunte «por la independencia». Y, en una entrevista a la ACN, ha abierto la puerta a añadir «otra propuesta». El presidente ha insistido en que «la independencia tiene que ser una opción» en la consulta, y que no se pueden mezclar «cuestiones muy diferentes» para evitar un resultado ambiguo: «El referéndum tiene que ser claro, y se tiene que percibir la voluntad de la ciudadanía sobre la independencia o sobre otra propuesta, si hay». Aragonès ha reiterado que el objetivo final de la votación tiene que ser resolver el conflicto político con el Estado. Por otra parte, ha apostado para que todas las mesas de negociación que hay ahora mismo acaben en uno «único espacio» por reclamar el referéndum.

Aragonès ha defendido un referéndum en Cataluña que pregunte sobre la independencia como propuesta para resolver el conflicto con el Estado, y a fin de que la ciudadanía se pronuncie: «Es el requisito imprescindible». En declaraciones a la ACN, el presidente de la Generalitat ha añadido que la consulta tiene que ser «clara» a fin de que se perciba la voluntad del país sobre «una cuestión concreta»

El jefe del ejecutivo ha aseverado que «la independencia tiene que ser una opción», y acto seguido ha añadido: «A partir de aquí, alguien puede tener otra propuesta. Pero la independencia tiene que estar sobre la mesa. Si no, no se cerrará el debate».

Aragonès dijo, a medios octubre, que apostaba por un «referéndum a la escocesa», como conclusión después de haber estudiado el informe del Consejo Académico por el acuerdo de claridad. El presidente añadió que la consulta se tenía que plantear de manera que la ciudadanía se pronunciara con uno 'sí' o uno 'no' sobre la independencia.

El presidente encargó entonces un informe al Instituto de Estudios del Autogobierno de la Generalitat para compartir los instrumentos jurídicos de la propuesta de un referéndum «posible, viable y legal». En la entrevista a la ACN, Aragonès ha explicado que el informe ya está «muy avanzado» y que se terminará durante las semanas entrantes.

Una única mesa

El presidente también ha opinado que espera mejorar la complicidad entre los partidos independentistas: «Espero que en el 2024 la coordinación sea una realidad», ha apuntado, para añadir que así se obtendrían unos «mejores resultados» para la ciudadanía del país.

Aragonès ha constatado que su «compromiso» con esta unidad es «claro», y que ya ha pedido varias veces, durante los últimos meses, que los partidos independentistas trabajen juntos. En este sentido, encuentra «deseable» que las diversas mesas de negociación -entre partidos y entre gobiernos- acaben en un «espacio compartido y único». Al menos para tratar cuestiones de fondo como el referéndum.

Sin embargo, Aragonès admite que ahora todavía no están «las condiciones» para hacerlo. El presidente cree que cada parte tiene que avanzar en su respectiva dinámica negociadora, para que se vaya creando una «confianza» entre todas las partes para poder avanzar.

«Todo lo que sea tener más fuerza es bueno. Y tendremos si trabajamos coordinadamente y con complicidad. Y, con más fuerza, más resultados para los ciudadanos,» ha reflexionado delante del micrófono de la ACN.

Mesa de partidos

Aragonès dijo en octubre que convocaría una mesa de partidos catalanes -excepto la extrema derecha de Vox- para analizar las conclusiones del informe de expertos del acuerdo de claridad. Donde el presidente expondría su propuesta de un referéndum «a la escocesa».

Esta reunión -que se tenía que celebrar entre finales de año y principios del 2024- no se tiene que hacer sí o sí antes de la reunión de la mesa de diálogo entre gobiernos -prevista para el primer trimestre del año que viene: «Se puede hacer en paralelo», ha comentado.

Así, el presidente insiste en que la mesa de partidos catalanes se tiene que hacer «con trabajo hecho, conclusiones y acuerdos sobre la mesa», tal como ha defendido el presidente: «No puede servir para tirarnos los platos por la cabeza».

Finalmente, Aragonès ha afirmado que no se imagina ningún otro escenario que la judicatura española aplicando la amnistía con normalidad.