Cataluña roza las 100.000 instalaciones de autoconsumo, que suman 950 MW
Las placas solares han proliferado por casas y edificios de Cataluña a un ritmo de crecimiento de tres dígitos desde 2018, duplicando e incluso triplicando volúmenes cada año
Cataluña cuenta ya con un total de 99.305 instalaciones fotovoltaicas de autoconsumo que suman 949,54 MW instalados. Estas instalaciones son las que constan en el registro de autoconsumo de Cataluña de la Dirección General de Energía de la Generalitat hasta el 30 de noviembre. Las previsiones de la Generalitat, confirmadas por los datos disponibles hasta finales del mes pasado, preveían que al cierre de 2023 se rebasarían las 100.000 instalaciones.
Hasta finales de junio, Cataluña sumaba un total de 84.882 instalaciones con una potencia instalada de 718 MW, por lo que las instalaciones de autoconsumo continúan al alza, aunque el incremento de los tipos de interés ha llevado a parte de la población a frenar un poco la toma de decisiones a la hora de plantearse colocar placas solares.
De hecho, empresas como Holaluz o SolarProfit han llevado a cabo diversos ajustes de plantilla este año como consecuencia de esta ralentización en el crecimiento de las instalaciones fotovoltaicas.
No obstante, los datos demuestran que Cataluña ha vivido un auténtico boom del autoconsumo en los últimos años. Para hacerse una idea del crecimiento experimentado, basta mencionar que en 2018 apenas se instalaron 101 instalaciones de autoconsumo fotovoltaico en Cataluña.
De aquella cifra se pasó a las 1.970 de 2019, a las 5.996 implantadas en 2020, a un total de 12.730 instalaciones en 2021, a 39.067 en 2022 y en solo la primera mitad de este año se registraron otras 25.018 instalaciones. Es decir, que las placas solares han proliferado por casas y edificios de Cataluña a un ritmo de crecimiento de tres dígitos, duplicando e incluso triplicando volúmenes cada año.
Del total de instalaciones fotovoltaicas dadas de alta en Cataluña, la gran mayoría (en torno a un 95 %) tienen una potencia menor o igual a 15 kW, por lo que la mayoría son de uso doméstico.
El desencadenante de este furor por las placas solares tiene su origen en la derogación del llamado 'impuesto al sol', en octubre de 2018, un cargo transitorio que se imponía a los autoconsumidores por la energía generada y consumida en la propia instalación.
El 'boom' del autoconsumo
El motivo principal del boom del autoconsumo es obviamente la voluntad de los consumidores de pagar menos por la energía, aunque la volatilidad en los precios provocada por conflictos como la guerra en Ucrania ha acelerado la apuesta de los ciudadanos por las placas solares.
También la Generalitat quiere potenciar al máximo el autoconsumo, y por ello transfirió el pasado mes de mayo a l'Energètica 58,9 millones para que ubicara instalaciones de autoconsumo en cubiertas y tejados de edificios públicos para alcanzar unos 77 MW en fotovoltaica a finales de 2024.