Les últimas nevadas animan a los esquiadores a desplazarse a las estaciones y permiten abrir algunos circuitos de nórdico

Les últimas precipitaciones caídas al Pirineo, tanto por Reyes como este miércoles y jueves, y el posterior ambiente frío, pero soleado, han animado a los amantes del deporte blanco a desplazarse a los diversos complejos de nieve de Cataluña. Así, Tavascan ya ha podido abrir las pistas de esquí alpino y el resto de estaciones han ampliado el número de kilómetros disponibles a sus dominios. Con respecto al nórdico, sin embargo, los grosores no han sido suficientes y, por lo tanto, se está trabajando a medio gas. Así, mientras Tavascan cuenta desde el lunes con 5,4 kilómetros de circuitos de fondo, en Tuixent – La Vansa se han podido habilitar cerca de 2,5. Mientras, Lles y Aransa cuentan con nieve en la zona de iniciación y el resto tienen abierto por raquetas y servicios turísticos.

El director de Tuixent - La Vansa, Albert Nadal, calcula que este sábado han pasado cerca de 400 personas por la estación. «Es el primer fin de semana con una gran afluencia de esquiadores» de esta temporada, ha afirmado. Así, aunque ha detallado que la última nevada «no ha sido muy abundosa», ha permitido trazar 2,5 kilómetros para hacer fondos, con lo cual, cruz es un buen fin de semana para iniciarse en la práctica de este deporte. Además, el complejo dispone de todos los circuitos de raquetas disponibles, con un total de 12 kilómetros.

La estación arrancó la temporada durante el puente de la Purísima con zona habilitada por iniciación gracias a la nieve producida. Gracias a las bajas temperaturas, ya cuentan con una base innivada que les permitirá poder abriendo el resto de circuitos con las próximas precipitaciones, aunque estas sean de carácter débil. Así, Nadal es muestra «optimista» a pesar de reconocer que esta temporada está siendo «muy extraña».

Diversos de los esquiadores que han decidido desplazarse hasta la estación proceden del área metropolitana de Barcelona. Es el caso de Núria Salas y Manel Pons, de Sant Cugat del Vallès, que han explicado que aunque haya poca nieve han decidido desplazarse para «hacer un poco de ejercicio» y disfrutar del paisaje. También han indicado que han querido aprovechar ante la incertidumbre de qué tiempo habrá en las próximas semanas.

También de Sant Cugat del Vallès venía el Alexi Llorens, que ha dicho que le apetecía «probar la nieve» en Tuixent y que espera «disfrutar del día» en la estación aunque los grosores sean todavía escasos. Por su parte, Melisa Quevedo, de Barcelona, ha explicado que ha venido a hacer raquetas con un grupo de una veintena de personas que son amantes del senderismo y de las actividades a la naturaleza. «Como hace un par de días que ha nevado decidimos que debíamos ir a la nieve», ha concluido.

Les actividades escolares de nieve, garantizadas

La técnica de la Mancomunidad de las Estaciones de Esquí Nórdico, Imma Obiols, dice que aunque la nieve impide abrir todos los circuitos de fondo en buenas condiciones, si que garantiza las actividades escolares, colectivo muy importante que los visita durante los meses de enero y febrero. En este sentido, ha destacado que estos grupos permiten fidelizar a los trabajadores cada año, sobre todo teniendo en cuenta que cada vez tienen más dificultades para encontrar técnicos de esquí dado que no se les puede garantizar que podrán trabajar toda la temporada completa.

Obiols ha afirmado que las estaciones de nórdico no disponen de «sistemas de innivación automatizados» como las de alpino y que, por lo tanto, este trabajo se lleva a cabo con recursos limitados y gracias a un trabajo duro del personal de las estaciones. Además, cree que el sector del esquí de fondo crecería si hubiera más nieve, teniendo en cuenta que las personas que lo practican son «fieles» y que se trata de un deporte de resistencia.

Por otra parte y con respecto al esquí alpino, las últimas nevadas han permitido alcanzar todo el desnivel esquiable y ampliar los kilómetros disponibles, llegando hasta los dieciséis, en la estación de Boí Taüll. Así, el complejo cuenta con cerca de una quincena de pistas abiertas y unos grosores que oscilan entre los 30 y 40 centímetros de nieve polvo dura, tal como ha explicado su director de marketing, Andreu Velilla.