Diari Més

Aragonès anuncia la puesta en marcha en los centros penitenciarios de unidades para personas vulnerables con patologías de salud mental

La primera unidad se pondrá en marcha antes del verano en el Centro de Puig de les Basses y acogerá a una veintena de personas en el antiguo pabellón de psiquiatría, vacío desde que se construyó ahora hace diez años

La previsión a medio plazo es que cinco centros penitenciarios del país cuenten con estas unidades especializadas.Generalitat de Catalunya

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El presidente de la Generalitat, Pere Aragonès, va anuciar ayer la puesta en marcha de las Unidades de Intervención Compensatoria (UICs) para personas vulnerables con patologías de salud mental en los centros penitenciarios. Estas unidades surgen de los trabajos entre el Departamento de Salud y el Departamento de Justicia, Derechos y Memoria, en colaboración con el Pacto Nacional de Salud Mental.

El Programa marco de atención a personas en situación de vulnerabilidad acumulada se ejecutará en dos fases. La primera se llevará a cabo durante el primer semestre de 2024, con la apertura de la UIC en Puig de les Basses, que contará con una inversión de 1,5 millones de euros. Posteriormente, en una segunda fase, se completará el despliegue del resto de unidades previstas por todo el territorio. El cronograma y los detalles de esta segunda fase se concretarán una vez se evalúe la UIC de Puig de les Basses, que se implanta primero como prueba piloto.

En este sentido, los trabajos entre los Departamentos de Justicia y Salud han detectado la necesidad de crear cinco UICs territoriales en los centros penitenciarios de Mas Enric, Lledoners, Puig de les Basses, Joves, Brians 1, con 12 y 20 plazas, y Brians 2, con 60 plazas. La previsión a medio plazo es que cinco centros penitenciarios del país cuenten con estas unidades especializadas.

Las UIC del CP en Puig de les Basses entraràn en funcionamiento antes del verano y acojerán a una veintena de personas en el antiguo pabellón de psiquiatría, construido el año 2014 y vacío desde entonces. Diez años después, se dará finalmente uso en este emplazamiento del centro penitenciario. Ambos departamentos ya han consensuado los criterios de alta y de baja de los usuarios, de la lista de espera y los circuitos de evaluación, de comunicación y de gobernanza de estas unidades.

También se prevé una dotación de profesionales especializados por parte de Salud y Justicia en la UIC del CP de Puig de les Basses. Para su funcionamiento, se contratarán una treintena de profesionales de la salud, la educación social, psicólogos, juristas, trabajadores sociales, técnicos deportivos, artísticos y mediadores interculturales, además del personal de régimen interior necesario.

«Esta legislatura tiene que ser la legislatura de la salud mental», afirmó Aragonès, quien destacó que estas problemáticas son todavía más intensas en las prisiones, donde el porcentaje de personas que las sufren «multiplica por 5 el porcentaje del resto de la población». Con estos datos sobre la mesa, Aragonès subrayó la necesidad que los centros penitenciarios puedan hacer bien su trabajo, «por la propia dignidad y tratamiento de los internos», pero también para alcanzar «el objetivo de la reinserción».

Por su parte, la consejera de Justicia, Derechos y Memoria, Gemma Ubasart i González, aseguró que la creación de estas unidades «representa un salto cualitativo y tendrá un impacto positivo en la convivencia en los centros, ya que disminuirá la incidencia y el uso de métodos coercitivos y es una pieza más que nos permite avanzar hacia el objetivo de contenciones mecánicas cero».

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