Medio Ambiente
Prohibido hacer fuego en el bosque en Cataluña desde este viernes hasta el 15 de octubre
El Departament d'Acció Climàtica dice que las lluvias de hace una semana no han reducido el riesgo a medio plazo
El Departament d'Acció Climàtica ha informado de que a partir de este viernes 15 de marzo y hasta el 15 de octubre ya no se puede encender fuego en terreno forestal. Esta prohibición entra en vigor en uno de los años más complicados por los efectos de la sequía, una de las más intensas y extensas del último siglo, derivada, principalmente, de la escasez de precipitación efectiva en los últimos tres años. Por zonas, la Cataluña central, Girona, el litoral y prelitoral central, la plana de Vic y el interior de las Terres de l'Ebre es donde hay más déficit de agua en la vegetación. Por especies , son el pino carrasco, la encina, el alcornoque, el pino rojo y la pinaza.
La norma regula que en los terrenos forestales, estén o no poblados de especies arbóreas, y en la franja de 500 metros que les rodea no se puede encender fuego sea cuál sea la finalidad.
Les actividades con riesgo de incendio forestal son aquellas acciones o prácticas que pueden desencadenar un incendio en zonas forestales u otras áreas naturales. Involucran la generación de fuego, deflagraciones o chispas en entornos propicios para la propagación de los incendios, y requieren supervisión y precaución para prevenir afectaciones ambientales y proteger la seguridad pública. Estas actividades pueden ser fuegos de recreo, hogueras y barbacoas, cremas de residuos vegetales o actividades pirotecnias, entre otros.
El año 2023, se ha superado la cifra de 50.000 actividades autorizadas en la época de alto riesgo y 100.000 comunicadas fuera de esta época.
Las solicitudes de estas actividades se pueden tramitar por Internet mediante un nuevo formulario y presencialmente en las oficinas que el Departament d'Acció Climàtica tiene en todas las comarcas. Esta prohibición tiene como objetivo establecer una serie de medidas para prevenir los incendios forestales.
Les lluvias caídas el fin de semana pasado han hecho disminuir el peligro inminente por todas partes, pero sobre todo allí donde han sido más abundantes como puede ser la zona de las comarcas de la Cataluña central, y han retrasado unas cuantas semanas la probabilidad de tener peligro muy alto generalizado. Han hecho disminuir mucho el peligro a corto plazo, en las próximas semanas, por el inicio de la primavera y gracias a la mejora del estrato herbáceo y arbustivo. Sin embargo, los índices de sequía continúan muy altos para esta época casi por todas partes, cosa que significa que amplias áreas arborizadas de la mitad norte del país, tradicionalmente fuera del radar de los incendios en esta época, también podrán sufrir días de elevado peligro de incendio.
En estas situaciones de sequía como el actual, un episodio de lluvia como el de hace unos días tiene un gran valor y consigue frenar el deterioro de la vegetación. Pero en situaciones de un déficit hídrico tan grande, difícilmente un episodio de lluvia puede resolver el problema.
La actual sequía está llevando la vegetación a una situación límite de decaimiento y mortalidad nunca vistas en extensión y distribución en muchos lugares del país. Los bosques están recibiendo un fuerte impacto por la climatología (sequía, perforadores, granizadas, los últimos grandes incendios).
Desde hace años, se observan diferentes especies que están muriendo. Esta situación es acumulativa durante los últimos años y hay que tener en cuenta que muchas masas afectadas, aunque no estén totalmente muertas, ya no se recuperan, y, contrariamente, favorecen nuevas afectaciones en las masas de los alrededores cada año más débiles. Los árboles secos y muertos por sequía aunque llueva no se recuperan y son combustible que en caso de incendio quema con mucha más facilidad.