Judicial
Condenado un hombre en lo que pillaron durmiendo en una casa en Platja d'Aro aprovechando que el propietario no estaba
El acusado evita el juicio con jurado popular y acepta 6 meses de prisión, que no tendrá que cumplir
Un acusado ha evitado un juicio con jurado popular y ha aceptado una condena de 6 meses de prisión para entrar en una casa de Platja d'Aro (Baix Empordà) aprovechando que el propietario no estaba. El condenado ha admitido que a las ocho de la mañana del 13 de noviembre del 2022 fue a la vivienda, forzó la puerta corredora del comedor y se instaló en la casa. Los Mossos d'Esquadra lo pillaron durmiendo en el sofá y lo «expulsaron» del inmueble. Se enfrentaba inicialmente a 2 años de prisión por un delito de allanamiento de morada. Como ha reconocido los hechos, fiscal y defensa han llegado a un acuerdo para rebajarle la condena. No tendrá que entrar en la prisión con la condición de no volver a delinquir y no pagar los desperfectos de la puerta.
A la vista, que se ha hecho en la sección tercera de la Audiencia de Girona, el acusado ha reconocido los hechos y ha aceptado la condena. El fiscal Víctor Pillado pedía inicialmente 2 años de prisión por un delito de allanamiento de morada. Como la fiscalía y la defensa han llegado a un acuerdo, el presidente del tribunal, Juan Mora, ha condenado al procesado de viva voz y ha declarado que la sentencia es firme.
Según recoge el escrito de acusación del fiscal que el procesado se ha suscrito, a las 8.09 horas de la mañana del 13 de noviembre del 2022 fue hasta una casa situada en la calle Monturiol de la localizado de Castell-Platja d'Aro. Era la residencia habitual de su propietario «legítimo» que aquel día no estaba: «Aprovechó que el propietario estaba fuera del domicilio con motivo de una celebración en Vilanova i la Geltrú».
Una vez en la calle, el condenado forzó la puerta corredora del comedor y se «instaló» en la casa, estirando-se en el sofá a dormir. Fue así como lo localizaron los Mossos d'Esquadra, que lo pudieron hacer marcharse de la vivienda.
Como la pena es inferior a 2 años de prisión y el procesado no tiene antecedentes, el tribunal ha acordado la suspensión de la condena y no tendrá que entrar en la prisión. A petición del fiscal ha acordado dos condiciones: que no vuelva a delinquir durante los próximos dos años y que pague los 121 euros de los desperfectos en la puerta corredora.