Un estudio describe por primera vez como el deporte de alta intensidad afecta la expresión genética

Investigadores del Instituto de Investigación Sant Pau y la Universidad Politécnica de Cataluña (UPC), en colaboración con el Barça Innovation Hub, han detectado alteraciones al sistema inmune, el metabolismo de los aminoácidos, la generación de energía y los niveles de estrés oxidativo del organismo justo después de practicar ejercicio de alta intensidad. Se trata del primer estudio que describe como el deporte de alta densidad afecta la expresión genética. Los resultados, que publica la revista ‘PlosOne Journals’, identifican diferentes perfiles de recuperación del esfuerzo físico, lo que permite de manera personalizada establecer una nueva manera de identificar qué jugadores son recuperadores rápidos o lentos basados en la expresión de los genes.

Este estudio es de los primeros a utilizar técnicas avanzadas de secuenciación mediante NGS (Next-Generation Sequencing), que permiten analizar la expresión de todo el genoma en la sangre.

La investigación se ha centrado en analizar el perfil de expresión de los genes de los jugadores de equipo de balonmano del Barça, examinando qué genes se activan o inhiben en función del esfuerzo físico de cada jugador durante el partido y relacionándolo con la preparación física y la capacidad de recuperación después de un partido.

El objetivo era relacionar los niveles de carga externa de los deportistas, ocasionados por la actividad deportiva de alta intensidad, con la activación de todos los genes del genoma de cada uno de los individuos.

Analizado el perfil transcriptómico de los deportistas, se pueden detectar aquellas alteraciones en la expresión de los genes de cada individuo que dificultan los procesos de recuperación deportiva y permite optimizar el rendimiento de los jugadores a través de intervenciones personalizadas, basándose en las características específicas de cada uno de los deportistas.