Sucesos
Inyectan 30.000 litros de agua en el vagón incendiado en Girona y el confinamiento se mantiene hasta el mediodía
El gas licuado quema de manera latente y aunque el peligro «no es demasiado elevado» los vecinos no pueden salir por precaución
Los Bombers han empezado a inyectar 30.000 litros de agua en el vagón del tren de mercancías que se ha incendiado en el Mas Gri de Girona para sacar el gas licuado y mantienen el confinamiento hasta el mediodía.
El jefe de guardia de la Región de Emergencias y responsable del operativo, Ferran Julià, explica que el gas que todavía queda dentro del vagón «quema de manera latente, como una vela», y que con la operación -que se prevé que dure unas tres horas- se quiere acabar de sacarlo y permitir que el vagón se pueda desplazar con seguridad para liberar la vía.
«El peligro no es demasiado elevado, pero por precaución pedimos a la gente que no salga de casa», ha explicado Julià. Los trenes de la R11 y la RG1 no circulan entre Girona y Caldes y se hace transporte alternativo.
El incendio en el vagón de mercancías que transportaba gas licuado mantiene acordonada toda la zona del Mas Gri, donde la Policía Municipal desvía el tráfico y tanto sus agentes como los mossos se aseguran de que ningún vecino salga de su casa. Esta situación, según las previsiones de los Bombers, se mantendrá como mínimo hasta el mediodía, hasta que dure todo el operativo que tiene que permitir liberar el gas licuado que todavía queda dentro del vagón.
El jefe de guardia de la Región de Emergencias ha explicado que esta madrugada, «la caída de la catenaria» ha abierto una grieta encima del vagón que transportaba gas inflamable y se ha producido «un dardo de fuego». Durante toda la noche, los Bombers han trabajado para evitar males mayores y poder sacar el gas licuado que hay en el vagón.
Ahora, Ferran Julià ha precisado que aunque la cisterna está vacía, «todavía no está neutralizada», porque hay parte del producto que quema de manera latente, «como si fuera una vela». Para liberarlo, y asegurarse del todo de que la cisterna no comporta ningún peligro, los Bombers han empezado a inyectar agua a poca presión hasta llenarla del todo. En total, tienen que invertir 30.000 litros.
«Eso permitirá desplazar el vagón con seguridad», ha concretado el jefe de guardia de la Región de Emergencias. Se prevé que la operación se alargue durante unas tres horas, durante las cuales se mantendrá el confinamiento de los vecinos de la zona en un radio de 200 metros (los de los pisos del tramo final de la calle Barcelona y las casas de la calle Reggio Emilia desde el cruce de la calle Manuel de Cazurro).
«Ahora mismo el gas licuado quema muy poquito y lo tenemos controlado; el peligro no es demasiado elevado pero por precaución, mantenemos el confinamiento y pedimos a los vecinos que tengan paciencia», ha explicado Ferran Julià.
El jefe de los Bombers también ha explicado que desconocen el por qué la catenaria ha caído encima del tren de mercancías. «Sabemos que ha hecho un arco voltaico y que ha cortado la cisterna, pero la causa no», ha concretado Julià, en referencia a la grieta que se ha abierto en el vagón.
Una vez se acabe el operativo y se garantice la seguridad, corresponderá a los gestores ferroviarios mover el tren de mercancías de la zona. El resto de vagones del convoy no se han visto afectados. El incendio y la caída de tensión, sin embargo, sí que han comportado que no circule ningún tren entre Girona y Caldes de Malavella (Selva). Aquí, Renfe ha habilitado un servicio alternativo con autobuses para cubrir el trayecto mientras dure la incidencia.
El alcalde de Girona, Lluc Salellas, que se ha desplazado hasta el lugar del operativo, ha admitido que el hecho de que este jueves sea festivo local -es Sant Jaume- ha permitido «que la situación sea más fácil de controlar y la gente se lo tome con más calma». El alcalde ha dicho que habrá que ver los motivos por los cuales la catenaria «cayó encima del tren» y se originó el incendio, y ha pedido a los vecinos tener paciencia y estar en casa, «porque aunque todo apunte que el riesgo es pequeño, siempre va bien tener un punto de precaución».