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Puigdemont reaparece en Barcelona después de casi 7 años de exilio

La intención del expresidente es intentar acceder al Parlament acompañado de unos 300 alcaldes

L'expresident Carles Puigdemont en la seva reaparició a Catalunya.

El ex presidente Carles Puigdemont en su reaparición a Cataluña.ACN

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Carles Puigdemont ha reaparecido este jueves por la mañana en el Arc de Triomf de Barcelona después de casi siete años en el exilio en Bélgica. El expresidente ha llegado poco antes de las 9 de la mañana al paseo Lluís Companys para el «recibimiento institucional» organizado por Junts y entidades independentistas, y también con representantes de ERC, la CUP y del Govern del 1-O.

«Hoy he venido aquí para recordarles que todavía somos aquí, porque no tenemos derecho a denunciar». Antes de intentar acceder al Parque de la Ciutadella, blindado por los Mossos, el jefe de filas de Junts ha admitido que «hoy muchos festejarán que sea detenido», pero ha hecho un llamamiento a «preparar nuevas oportunidades» después de la investidura de Illa.

Puigdemont ha recordado que hace siete años que hay en marcha una persecución que ha afectado «la vida de miles de personas» solo por el hecho de ser «independentistas» o «hablar catalán». «La represión ha hecho muchos estragos y continuará haciendo mientras no se pare la politización de la justicia», ha remachado, «mientras cuatro jueces manden más que un Parlament, se permita al PP controlar la sala segunda del Supremo por la puerta trasera y Vox ejerza de acusación particular para perseguir disidentes políticos».

Una coyuntura que ha admitido que ha hecho «mucho daño» y que precisamente por este motivo hoy ha venido aquí para recordar que «todavía estamos aquí». «El derecho a la autodeterminación pertenece a los pueblos y nadie desde la política puede renunciar a un derecho que es colectivo», ha insistido durante su discurso. Puigdemont ha añadido que hay «muchos que hoy piensan festejar» su detención y que se «piensan» que este «escarnio» disuadirá a la gente.

«Pero se equivocan», ha subrayado, «y en su error arrastrarán una vez más la credibilidad de la democracia española, aunque esto les importa muy poco». «Ni es, ni era, ni será nunca un delito hacer un referéndum, como tampoco obedecer el mandato del Parlament de Cataluña», ha añadido. Precisamente, para acabar su intervención, el expresidente se ha referido al Pleno de esta mañana, en el que tiene que ser investido el socialista Salvador Illa.

«Nosotros somos aquellos que aquello que aprueba el Parlament, nos guste o no, lo respetamos y tenemos que hacer la nuestra. En los días difíciles tenemos que apoyarnos cómo nunca y saber preparar nuevas oportunidades porque las tendremos», ha afirmado, «no sé cuando nos volveremos a ver, pero cuando esto pase que podamos volver a gritar juntos: Viva Cataluña libre».

El acto de recibimiento de Puigdemont ha empezado a las ocho y media de la mañana en el Paseo Lluís Companys de Barcelona, ante el Arc de Triomf. Según la Guardia Urbana, unas 3.500 personas han acudido a la cita, muchos de ellos con pancartas, caretas del expresidente y banderas. Una vez concluida su reaparición, el expresidente de la Generalitat ha abandonado la comitiva que ha bajado en dirección al Parlament.

En esta se ha podido ver la presidenta de Junts, Laura Borràs, los expresidentes de la Generalitat, Artur Mas y Quim Torra, el actual presidente del Parlament, Josep Rull, los diputados de Junts y el abogado de Puigdemont, Gonzalo Boye, entre otros.

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