El juez que emitió el voto particular de 'la Manada' tiene «expedientes abiertos»
«Todos saben que el juez González tiene algún problema singular», ha dicho el ministro de Justicia, Rafael Català
El ministro de Justicia, Rafael Català, ha defendido este lunes que el Consejo General del Poder Judicial (CGPJ) tendría que haber ejercido su «potestad disciplinaria» contra el juez Ricardo González, al magistrado que emitió un voto particular –de más de 200 folios- pidiendo la absolución de los cinco acusados de 'La Manada'. «Cuando todos saben que este juez tiene algún problema singular, me sorprende que el CGPJ no actúe», ha señalado Catalá en una entrevista en la cadena Cope. El ministro de Justicia no ha querido explicitar cuáles son estos «problemas singulares» del magistrado Ricardo González pero sí ha adelantado que tiene algunos «expedientes abiertos». «Todos lo saben y me sorprende la reacción de magistrados y fiscales», ha puntualizado Catalá. Según ha destapado OK Diario, el juez que solicitó la absolución de los miembros de 'La Manada' tiene dos expedientes disciplinarios abiertos, uno muy grave, del mismo CGPJ por «excesiva dilación y dilación injustificada en la tramitación de las causas». Concretamente, y según informa la agencia EFE, el magistrado tardó 14 meses en redactar un fallo sobre divorcio.
«En España tenemos 5.500 jueces magníficos y muy profesionales. Pero, como en todas las corporaciones, hay algunas personas con dificultades. Si en el Tribunal Superior de Justicia de Navarra conocían esta situación, se tendría que haber actuado preventivamente», ha sentenciado el ministro de Justicia, que considera que la 'indignación' de la sociedad se ha producido –más que por la sentencia- por las expresiones utilizadas en el voto particular del juez González, que asegura que en los vídeos y fotografías de la violación de los 'Sanfermines' no se aprecian signos de violencia sino de «desinhibición total» en un ambiente de «jolgorio». Aparte, el magistrado considera en su resolución particular que los gestos, expresiones y sonidos de la víctima son fruto de «la excitación sexual».
Paralelamente, el ministro Catalá niega que el gobierno español «esté legislando en caliente» después de que se haya pedido la revisión de la tipificación de los delitos sexuales en el Código Penal. «Yo soy partidario de que las leyes se adapten a la realidad social. Si hay un desajuste, se tiene que legislar para cambiarlo», ha corroborado al titular de Justicia. «Pero no de forma precipitada ni desde un punto de vista populista. Los expertos en Derecho Penal se tienen que tomar su tiempo y los partidos decidiremos sobre sus conclusiones. Pero yo no veo ninguna acción precipitada», ha insistido Catalán. «En materia de quiebras de empresas hemos reformado la ley concursal tres veces durante la crisis», ha justificado al ministro de Justicia. «I en la lucha contra la violencia hacia la mujer me parece aconsejable escuchar a los expertos y, si procede, cambiar el Código Penal, ha concluido Catalán».