Política
Puigdemont fija la amnistía como condición «previa» para empezar a negociar un «acuerdo histórico» con el Estado
El expresidente avisa de que hoy por hoy no se dan las condiciones y pide un proceso «serio, honesto y ambicioso»
El expresidente Carles Puigdemont fija la amnistía como condición «previa» para empezar a negociar un «acuerdo histórico» con el Estado. En la conferencia celebrada este martes en Bruselas, Puigdemont ha puesto como condición para negociar la investidura un «abandono completo y permanente de la vía judicial contra el independentismo». «Eso es al alcance del parlamento español, a través de una ley de amnistía», ha dicho. El expresidente ha avisado de que hoy por hoy no se dan las condiciones para negociar y ha pedido que el proceso para una eventual negociación sea «serio, honesto y ambicioso». El expresidente también ha dicho que la negociación dependerá de la autodeterminación, necesaria para «resolver el problema de fondo».
En la conferencia, Puigdemont ha fijado cuatro condiciones previas para empezar a negociar la investidura de Pedro Sánchez. Con respecto a la amnistía que reclama que apruebe el Congreso, Puigdemont ha apuntado que tiene que incluir un «amplio espectro de la represión iniciada antes del 9-N». «El 1 de octubre no fue un delito, como tampoco lo fue la declaración de independencia, ni las protestas masivas contra la represión y la sentencia del Tribunal Supremo. El abandono de la represión al independentismo democrático es una exigencia ética y tiene que ser un abandono permanente», ha señalado.
Por otra parte, el eurodiputado de Juntos ha reclamado la creación de un mecanismo de «mediación y de verificación que aporte las garantías del cumplimientoy seguimiento de los acuerdos que los dos grandes partidos políticos españoles no están en condiciones de dar». «La total falta de confianza entre las partes hace que este mecanismo sea imprescindible, y que tenga que operar desde el inicio de las negociaciones», ha dicho, apuntando que «la experiencia impide tener ninguna confianza en la palabra» de los partidos españoles.
Por otra parte, Puigdemont ha pedido que los límites para empezar a negociar sean «los definidos por los acuerdos y tratados internacionales» de derechos humanos y libertades fundamentales, así como también el «reconocimiento y con respecto a la legitimidad democrática del independentismo».
Un «acuerdo histórico»
El eurodiputado de Junts ha subrayado que ninguna de las condiciones previas fijadas es «contraria» en la Constitución y que «se tienen que poder cumplir antes no se agote el plazo legal para evitar nuevas elecciones». «Sólo dependen de la voluntad política», ha afirmado, subrayando que «el acuerdo histórico» al cual se refiere tiene que ser un «compromiso histórico» no hecho por ningún régimen ni gobierno español desde el 11 de septiembre de 1714 y el Decreto de Nueva Planta.
Puigdemont ha advertido que España se encuentra en un «dilema de resolución compleja». «O repite elecciones, con el riesgo de que los equilibrios políticos sean tan frágiles como ahora; o pacta con un partido que mantiene la legitimidad del 1 de octubre y que no ha renunciado ni renunciará a la unilateralidad como recurso legítimo para hacer valer sus derechos», ha avisado.
En su intervención, el expresidente ha remarcado «la necesidad y urgencia» de crear las condiciones necesarias para empezar la negociación y ha considerado «improcedente» establecer los «objetivos concretos» de la posible negociación para la investidura. Ahora bien, ha advertido que «no hay una receta autonómica para resolver los problemas de Cataluña». «Aquello determinante es el reconocimiento nacional de Cataluña y por lo tanto de su derecho a la autodeterminación», ha afirmado Puigdemont, remarcando que sólo un referéndum pactado con el Estado puede «sustituir el mandato político» del 1-O.
A la conferencia han asistido representantes de Junts como Laura Borràs, Jaume Giró, Victòria Alsina, Jordi Turull y Míriam Nogueras, entre otros. Por parte de ERC han asistido Teresa Jordà y Francesc-Marc Álvaro y de la CUP Carles Riera.