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Tensión máxima en el Oriente Próximo por la escalada de la violencia entre Israel y el Líbano
El ejército israelí acusa a Hezbollah del ataque que mató a una docena de jóvenes a los Altos del Golán
Fuerzas de seguridad y médicos israelíes trasladan a las víctimas de un ataque lanzado desde el Líbano a la ciudad de Majdal Shams, en los Altos del Golán
Tensión máxima en el Oriente Próximo por el posible estallido de una guerra regional que implique el Líbano a raíz de la escalada de la violencia entre Israel y Hezbollah. El ejército israelí ha bombardeado durante la noche varias localizaciones del sur y el interior del Líbano como represalia por el ataque del sábado que mató 12 niños y adolescentes en un campo de fútbol al territorio de los Altos del Golán y que atribuye a Hezbollah.
El primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, ha advertido que Hezbollah pagará «un alto precio» por el atentado. Mientras tanto, el secretario de Estado de los Estados Unidos, Antony Blinken, ha hecho un llamamiento a evitar una escalada regional de la guerra.
Con todo, Blinken ha admitido que Israel tiene el derecho a defenderse y que todo apunta que el ataque al campo de fútbol sería obra de Hezbollah.
En cambio, desde el Líbano, el ministro de Exteriores, Abdallah Bou Habib, ha asegurado a la BBC que no cree que el bombardeo fuera cosa de este grupo, aunque también ha hecho un llamamiento a evitar una nueva escalada.
