Multan a 17 jóvenes para beber y orinar en la calle la primera noche de Saloufest
La policía local sanciona a los británicos que llegaron el domingo por la noche y que se marcharán jueves
Diecisiete sanciones por incivismo. Este es el balance de multas que ha generado la primera hornada de estudiantes británicos de Saloufest, durante la primera noche que han pasado en la capital de la Costa Daurada, de domingo a lunes.
La policía local de Salou multaba a diecisiete jóvenes para incumplir la ordenanza de civismo; en concreto, para beber y orinar en la vía pública la noche del domingo. Los universitarios que fueron pillados bebiendo en la calle tendrán que hacer frente a una sanción de 300 euros. Los que fueron sorprendidos por la policía local orinando en la calle, pagarán 100 euros, según establece la misma ordenanza de civismo. Por otra parte, el Ayuntamiento de Salou confirmaba ayer que, durante la primera noche de su estancia, no se había producido ningún tipo de destrozo en el mobiliario urbano. Según el consistorio, no se ha hecho un refuerzo especial por la presencia de estos jóvenes en la noche salouense, más allá del habitual en las puertas de la Semana Santa.
Los jóvenes universitarios británicos que han llegado a Salou a través del polémico paquete turístico se alojan en siete establecimientos hoteleros. En esta primera serie, han llegado 2.000 jóvenes, que ayer por la mañana se encontraban realizando actividades y deportivas en algunos equipamientos privados, entre estos el CN Plomos. Este año, el operador turístico I Love Tour ha decidido evitar que los jóvenes de Saloufest fueran fotografiados durante la realización de las actividades deportivas. Sólo trascendia alguna instantánea en las redes sociales. Saloufest llevará|traerá a 3.900 jóvenes británicos más al municipio del 29 de marzo en el 2 de abril y, por último, un último grupo de 1.400 estudiantes del 5 al 9 de abril.
Por otra parte, la directora general de Turismo de la Generalitat, Mariam Muro, se refería ayer al rechazo que suscita este turístico entre las administraciones públicas. «Como Generalitat lo único que podemos hacer es inspeccionar los hoteles que acogen a los jóvenes y velar para que se cumpla la ley. Es el sector privado, el que también stà en contra, lo que tiene que decir la suya», decía Muro en declaraciones delante de los micrófonos de Cataluña Radio.