Kibuc se expande y planea abrir en Tarragona y Reus
La empresa de muebles tiene actualmente en Cataluña una cuota de mercado del 30%
La cadena de muebles Kibuc prevé crecer un 15% este año y llegar a una facturación próxima a los 50 millones de euros, mientras prepara su expansión por el territorio español, después de consolidar su implantación en Cataluña. Con un 30% de cuota de mercado, Cataluña es el principal ámbito de implantación de Kibuc, que en los próximos meses inaugurará nuevas tiendas en Vilanova i la Geltrú y l'Hospitalet de Llobregat, y no descarta abrir también a otros municipios como Tarragona, Reus, Sabadell (Vallès Occidental), o Terrassa (Vallès Occidental).
Kibuc, con sede en Cardedeu (Vallès Oriental), nació el año 1993 como central de compras de una veintena de empresas catalanas, aunque en el año 2000 pasó a constituirse como una franquicia, apostando por el diseño propio.
La firma, que cerró en el 2015 con unas ventas de 43 millones de euros, un 8% más que el ejercicio anterior, cuenta actualmente con una plantilla de 510 personas y una red de 52 tiendas a varias comunidades autónomas.
«Queremos consolidar nuestra presencia en Cataluña y entonces empezaremos a plantearnos la expansión en otras zonas», explica el presidente de Kibuc, Xavier Sòria, que recalca, en todo caso, que «no hay prisa» para llevar a cabo este crecimiento.
Kibuc ya tiene una fuerte presencia en el País Vasco, pero ve «muchas posibilidades deaberturas» en Madrid y prevé también crecer en Zaragoza, Galicia, Andalucía o la zona del Levante español.
La compañía abrió cinco establecimientos en el 2015 y tiene previsto abrir entre tres y cuatro nuevas tiendas tanto este año como el próximo.
Xavier Sòria hace especial énfasis en que la compañía opera sin un ritmo marcado de nuevas aberturas y que su objetivo es «ir creciendo y digiriendo este crecimiento».
La llegada a mercados extranjeros, no obstante, es una cosa que todavía «queda lejos» para Kibuc: «Tenemos mucho mercado nacional por recorrer y de momento no nos lo planteamos», sostiene al directivo.
A pesar de la crisis económica y la atonía que ha caracterizado el sector del mueble y la decoración los últimos años, Kibuc ha conseguido crecer de forma notable, gracias, según Soria, en la apuesta por la personalización de los productos y a una adecuada relación calidad-precio.
Kibuc ha conseguido diferenciarse de la competencia ofreciendo muebles de calidad a precios asequibles y ha sido capaz de captar un cliente que se caracteriza por tener entre 35 y 55 años, «que busca una línea de muebles moderna y que es sensible a tener su casa bonita, que sea un reflejo de su propia personalidad».
Xavier Sòria remarca que la multinacional sueca Ikea tiene un mercado diferente de Kibuc: «No nos consideramos competidores directos, sino complementarios, porque los valores que tienen sobre producto, precio y calidad no tienen nada que ver con nosotros», detalla.
Kibuc tiene externalizada la producción en diferentes fábricas de España, Portugal y, puntualmente, de Italia.