Un dron refuerza la vigilancia en las playas de Cunit
En funcionamiento desde este junio, la Policía Local controla el aparato, que incluso está preparado para tirar un flotador en caso de ahogo
El servicio de vigilancia en las playas de Cunit ha introducido, este verano, el uso de un dron concámara de vídeo. El objetivo es ampliar el espacio que a simple vista pueden controlar los socorristas. A través de una tableta, la Policía Local y Protección Civil pilotan el dron para tener una visión completa de los espigones y profundizar mar adentro, hasta un kilómetro de distancia.
«La principal ventaja es la rapidez de actuación que ahora tenemos ante una situación de emergencia», destacaelJefe de Protección Civil en Cunit, Vicente Luna. Al mismo tiempo, el mismo aparato también está preparado para llevar un flotador para tirar desde el aire a poca altura a aquellos bañistas que tengan dificultades para salir del agua. Los servicios de emergencias quieren agilizar así la primera ayuda mientras el socorrista llega nadando a auxiliar a la persona que se está ahogando.
El uso del dron en las playas de Cunit ha sido una iniciativa de un agente de la Policía Local, Dani Olmo, y del Jefe de Protección Civil, Vicente Luna, que remarca que tener una imagen aérea de la zona de baño «permite conocer las situaciones reales». Así, recuerda como ejemplo un accidente ocurrido el año pasado, en el que un socorrista entró en el agua a auxiliar a un bañista con dificultades sin embargo, en realidad, eran dos las personas que se estaban ahogando. «Eso es un tiempo de reacción que se pierde», lamenta Luna, asegurando que ahora el dron permite evitar situaciones de este tipo, ya que los servicios de emergencia elevan el aparato tanto buen punto detectan una anomalía dentro del agua y la cámara facilita imágenes del accidente «en cuestión de según». De esta manera, el dispositivo humano que se activa es más ajustado a las necesidades de la emergencia.
Aparte del despegue en situaciones de riesgo, sin embargo, el dron también sobrevuela las playas de Cunit tres veces al día. Lo hace a modo preventivo, tanto para analizar el comportamiento de los bañistas como el estado del mar. En todos los casos, sólo lo pilotan el agente de la Policía Local formado para la ocasión y el mismo Vicente Luna, mientras que el resto de vigilantes de salvamento han recibido una formación específica para dar órdenes a los mandos en caso de necesidad.
Zonas problemáticas
En Cunit hay aproximadamente 2,5 kilómetros de playa, dividida por siete espigones. Es este el elemento que más inquieta a los responsables de la vigilancia, que admiten que son zonas «problemáticas», ya que generan corrientes y dificultan la visualización a los socorristas. Vicente Luna recuerda que las puntas de espigones tienen el acceso restringido pero reconoce que a menudo los bañistas hacen caso omiso. Por eso aplaude que el dron los permite ahora acceder también a controlar estos espacios.
Lanzamiento de flotador
Aparte de la videovigilancia, el dron que se ha puesto en marcha este verano en las playas de Cunit también está preparado para llevar incorporado un flotador que se puede tirar a los bañistas que tienen dificultades para salir del agua. En este caso, Luna subraya nuevamente la rapidez que ganan en la actuación, ya que el aparato despega y desprende el flotador mucho antes de que pueda llegar el socorrista. «Un dron puede recorrer200 o 300 metros en cuestión de segundos, mientras que un profesional tiene un tiempo de respuesta mayor», señala a Vicente Luna, que destaca que se trata de una diferencia de tiempo «vital».
La puesta en marcha de este aparato ha comportado una inversión de casi 5.000 euros que ha asumido íntegramente el Ayuntamiento de Cunit. El dron está en servicio desde finales del mes de junio y se mantendrá activo en las playas hasta el 15 de septiembre. En función del balance que se haga una vez acabada la temporada de playas, Luna no descarta la posibilidad de invertir en un segundo dron con videocámara de cara al verano del 2017 para ampliar el radio de control y no depender sólo de un solo aparato.