Un total de 2.014 personas mayores esperan para entrar a una residencia
El colectivo denuncia que muchas mueren antes de poder acceder, y que, otras, se ven obligadas a marcharse de los centros al no llegarles la pensión
Un total de 2.014 personas están en lista de espera en la provincia de Tarragona para poder acceder a una residencia de personas mayores de titularidad pública o concertada. Son cifras de este último mes de julio, del Departamento de Trabajo, Asuntos Sociales y Familias de la Generalitat, obtenidas a través de una pregunta parlamentaria del grupo de Ciudadanos en el Parlamento.
En el desglose por comarcas, son los habitantes del Tarragonès,quién peor paradossalen: la lista para obtener una plaza es de 716 personas. En segunda posición, a cierta distancia, se sitúa el Baix Camp, con 350 personas esperando su sitio. Le siguenel Baix Penedès, con una cola formada por 267 personas, y el Baix Ebre con 234 ciudadanos. El Alt Camp por su parte registra una lista de 160 personas, muy similar al Montsià, donde hay 163 personas apuntadas, esperando para acceder a un centro público o concertado. Por otra parte, las cuatro comarcas tarraconenses restantes, que registran cifras de espera bastante bajas: la Conca de Barberà (51), Ribera de Ebro (35), Terra Alta (22), Priorat (16).
Mueren antes de poder acceder
La principal queja del colectivo de personas mayores es que muchas personas morirán esperando su turno antes de que los servicios de la Generalitat les confirmen que ya disponen de una plaza en una residencia. «Eso es muy grave», afirmaba Elisabeth Valencia, parlamentaria de Ciutadans. «La lista de espera media, según las entidades del sector, llega a los cuatro años», añadía la política. La problemática no ha hecho más que agravarse a causa de los efectos de los recortes del Gobierno, desde el 2011. «Cuando se empezaron a aplicar los recortes, teníamos una lista de espera en Cataluña de unas 17.000 personas, ahora superamos las 24.000. Es muy superior con respecto a de otras comunidades autónomas», explicaba Valencia.
Pero el impacto de la crisis económica también está provocando todo el contrario: muchas personas mayores se ven obligadas a dejar la residencia donde viven, al verse incapaces de hacer frente al gasto que supone, ya que no les llega la pensión. Es una pensión que desgraciadamente, en muchas ocasiones, también tiene que servir para costear la vida de los hijos en paro y de sus nietos. «Los precios que tienen son muy caros, hay gente que no lo puede pagar, yo lo estoy viendo cada día, personas que se tienen que marchar de la residencia porque no la pueden seguir pagando. Hacen falta más ayudas», pedía Manuel Martínez, presidente del Grupo de Jubilados y Pensionistas del centro de Tarragona. Derivada de esta problemática económica, aparece en muchos casos, la soledad: «Hay personas que dado que no pueden entrar o se han tenido que marchar de allí, se quedan solas en su casa, muchos tienen peligro de caer y que nadie se dé cuenta hasta al cabo de unos días. La Generalitat tendría que ir más con cuidado, que cuando una persona se ha caído o sale de una operación complicada, tendría que poder entrar a una residencia. También creo que tendría que haber más residencias públicas. En la zona de Tarragona tendrían que construir o hacer las que hay mayores», apuntaba Martínez.
Sin embargo, no todo el problema es derivado de la falta de espacio, según el partido de Ciutadans, en toda Cataluña hay 6.000 plazas vacías en residencias y centros de día –listas para poder reducir las listas de espera– que no se están utilizando. Además, el Síndico de Agravios ya alertó al gobierno que no se están gestionando adecuadamente las solicitudes de prestaciones de dependencia.
Incidencias en residencias
La Generalitat realizó entre el 2014 y el 22 de abril de 2016, 959 visitas de inspección a las residencias de Cataluña, tanto públicas como concertadas, de las cuales se registraron 360 avisos de incidencias o carencias. Los centros de la tercera edad de la provincia de Tarragona, con 24 informes de incidencias, son los segundos con más problemáticas detectadas de Cataluña, superando en Gerona (13) y Lérida (8), todo y que a mucha distancia de Barcelona (243), donde más se produjeron. Del total de problemas destacados en el global de residencias, 245 incidencias se han acabado resolviendo de forma favorable, pero otros 43 lo han hecho de forma desfavorable. La Generalitat elabora cada año un plande inspecciones.