'Descalces on tour' llega a todas partes

Aquello que empezó como una actuación por la noche de Artistas de Cambrils de hace cinco años, se ha convertido en toda una gira por todo el territorio catalán e, incluso, ha traspasado fronteras. Se trata de la formación musical Roba Estesa, un sexteto femenino que está haciendo rodar su primer disco Descalcescon la reivindicación y la lucha de género como insignia. Ahora bien, el arrebato también es uno de sus emblemas que se puede apreciar con el primer acordede sus canciones. Clara Colom, el acordeonista del grupo, explica que «ahora nos encontramos en un momento muy brillante, en el cual estamos disfrutando y recogiendo los frutos de todo el trabajo que hemos hecho durante el invierno.» Largas horas de ensayo, tiempo para componer y tardes enteras en el estudio han sido los ingredientes claves para dar vida a Descalces. Hasta el otoño, tienen programadas una treintena de actuaciones y ya han hecho paradaen localidades próximas como Reus, Tarragona, la Selva del Camp, Riudoms, pero también han llegado a lugares como Sabadell, Banyoles, Barcelona y Hungría. Ayer, participaron en la Fiesta Mayor de Gracia y, hoy, lo harán en el barrio de Sants. Por su parte, la guitarrista, Neus Pagès, detalla que «los ítems que se presentan en nuestro trabajo son las mujeres, la lucha y la tradición». A partir de aquí, las letras se fusionan para escenificar la lucha feminista y rechazar también situaciones «de homofobia, racismo y machismo».

Roba Estesatambién se presenta como una formación decidida a actualizar las canciones tradicionales del territorio, de manera que utilizan la mirada al pasado para crear ritmos de futuro que impiden que el público se quede quieto. «No sabíamos como definir nuestro estilo y lo hemos bautizado como folkcalentó», relata la bajista, Anna Sardà. «La esencia de nuestra tradición es el fuego, símbolo de lucha y fiesta, de manera que nos presenta en todos los sentidos, añade».

El grupo –formado también por Gemma Polo y Clàudia García-Albea- ha evolucionado desde sus inicios, el año 2011, y cada vez juegan más con la puesta en escena. Por parte de sus seguidores, una de las canciones más conocidas es La pagesa, que ahora se puede escuchar en versión electrónica. «Decidimos presentarla de otra manera, como show final», reconoce a Neus Pagès. De esta manera, queda constatado que otro elemento clave de la buena sintonía de esta formación son las ganas de reír y pasar un buen rato. La guitarrista no se esconde de explicar que, sobre el escenario, «tenemos la dinámica de hacernos alguna jugarreta, eso sí, con mucha estima, como por ejemplo, desafinarnos los instrumentos entre nosotros. Todo ayuda a soltarnos y hacer que el público disfrute con nosotros». Una de las veces que las mismas artistas quedaron sorprendidas en medio de una actuación estuvo durante su paradaen Budapest. «Cuando acabamos los conciertos, nos hacemos una foto con el público, unselfie. Ahora bien, cuando les dijimos que nos haríamos la fotografía, todo el público subió al escenario y nosotras nos quedamos interesadas», explicaba Alba Magriñà, a la percusionista. Descalces hace días que anda, pero todavía los queda mucho recorrido. Está previsto que lleguen al país valenciano y a Palma de Mallorca.