Denuncian la falta de material de los Mossos por manipular el cannabis
El sindicato USPAC alerta de que algunos agentes, al acabar la operación, tienen que actuar en servicios de auxilio posiblemente con los efectos de la sustancia
El sindicato USPAC de los Mossos d'Esquadra denuncia que los agentes de los grupos UI y USC que trabajan en el desmantelamiento de las plantaciones de marihuana, no pueden realizar su trabajo con todas las garantías de salubridad y seguridad por falta del material necesario para hacerlo. Los agentes alertan de que este material es imprescindible cuando la tarea se realiza en plantaciones indoor (de interior) donde, a veces, se pueden llegar a concentrar entre 500 y 2.000 plantas de marihuana.
«Los agentes que han están expuestos en las plantas durante los decomisos inhalan durante mucho rato las partículas orgánicas volátiles que se desprenden de forma natural y aumentan durante la manipulación de la planta y, a menudo, desarrollan síntomas como cefaleas, mareo y malestar general producido por el contacto con la planta y la inhalación de partículas, ya que los agentes no se encuentran habituados al consumo de esta sustancia,» denuncia el USPAC.
Lo que preocupa verdaderamente es que muchos de estos agentes después tienen que conducir el vehículo policial e, incluso, seguir prestando servicio ordinario y asistiendo a servicios de auxilio o de protección de la seguridad ciudadana con el arma reglamentaría, aunque pueden estar bajo los efectos de estas sustancias psicotrópicas». En caso de que el agente sufriera un accidente o realizara una actuación policial con resultado lesivo para|por alguna persona «las consecuencias serían pesadas para los funcionarios, ya que podrían encontrarse a todos los efectos, bajo la influencia de sustancias estupefacientes y, en caso de realizarse las pruebas de detección de sustancias psicotrópicas en saliva o sangre, no queda claro que no resultara positivo en cannabis». Denuncian, por otra parte, que la Dirección General de la Policía, no ha hecho estudios específicos sobre esta problemática.
Aparte, «durante la operación, no se dispone de material específico, que no es considerado policial, pero necesario para efectuar la tarea, como unas tijeras de podar, tampoco se dispone de talla de cables eléctricos con protección de 1000 voltios o guantes de goma. También hay que remarcar, que el polvo de polen que desprenden las plantaciones queda impregnado en toda la ropa, dejándola pegajosa y con mucha peste de marihuana agravante todavía más los síntomas por exposición al cannabis».
Además, el USPAC asegura que tampoco se utilizan bolsas adecuadas para precintar estas sustancias. «Las que se utilizan no evitan que salgan los olores y las partículas». El sindicato solicita que se dote a las unidades del material adecuado, «con de equipos de protección individual (EPI), con rana de un solo uso, con polainas y capucha, así como una mascarilla con dispositivo de filtraje adecuado a la exposición de esta sustancia y no una genérica, así como unos guantes de nitrilo. El material, tendría que ser de dotación personal, ya que en cualquier momento, cualquier agente puede encontrarse realizando esta tarea». Aparte, también piden a la Subdirección General de Prevención de Riesgos y Salud Laboral que efectúe el estudio para objetivar los resultados negativos en el organismo, derivado de tratar continuamente con sustancias estupefacientes y el posible desarrollo de posibles enfermedades derivadas de este hecho «que tendrían que ser consideradas a todos los efectos como enfermedad laboral», apunta al sindicato.