Doce estafados en Tarragona por falsas contrataciones publicitarias en nombre de la Guardia Civil
Se han detenido tres personas de la organización delincuencial, que se dedicaba a estafar contratación de publicidad para revistas de cariz policial
Un total de 12 particulares y empresas de la provincia de Tarragona han sido víctimas de una organización delincuencial con sede en Madrid que se dedicaba a estafar contratación de publicidad para revistas de cariz policial el nombre de la Guardia Civil, la Policía Nacional y la Policía Local. La Guardia Civil de la Región de Murcia ha detenido a tres personas e investigado 14 en una operación denonimada ‘ROPU’, dedicada a este caso que ha afectado a un millar de particulares y empresas de todas las provincias del Estado.
Concretamente en Tarragona ha habido un afectado en Alcanar, uno en Amposta, uno en Blancafort, uno en Cambrils, uno en la Noria, uno en l'Aldea, uno en Montblanc, dos en Reus, dos en Tarragona y uno en Torroja del Priorat. La investigación continúa abierta, por lo cual no se descarta que existan otros perjudicados.
La organización criminal se dedicaba presuntamente a recaudar publicidad en nombre de la Guardia Civil, la Policía Nacional y la Policía local con la finalidad de obtener anunciantes para las revistas de temática policial, de asociacionismo profesional o sindicales. Con este método se aseguraban la colaboración de los patrocinadores y la eficacia con sus clientes, publicaciones legales que no sabían nada de la estafa.
Entre los afectados hay casos de víctimas que nunca recibieron la revista con la cual colaboraban, otros que recibían una diferente y otros que los facturaban por la inserción de publicidad a pesar de haberse negado a colaborar. Por otra parte, alguno de los perjudicados también habría recibido llamadas telefónicas en que el interlocutor lo presionaba cuando se negaba a colaborar.
También se han visto afectados por los delitos al menos dos sindicatos policiales que aparecen, ya que sus logos o siglas aparecen en las facturas expeditas a nombre de los clientes utilizados por los estafadores para tener una mayor credibilidad.
Los inicios de la operación ‘ROPU’
La operación ‘ROPU’ se inició el pasado mes de febrero cuando la Guardia Civil supo que varios agricultores de Jumilla estaban recibiendo llamadas telefónicas de personas que, identificándose como guardias civiles, solicitaban colaboraciones económicas mediante la inserción de publicidad en revistas oficiales de la Guardia Civil. Alguna de las víctimas colaboraron con los presuntos estafadores sin saber que se trataba de una engañifa, mientras que otros habían recibido cargos en las suyas cuentos bancarias sin expresar su consentimiento. La Guardia Civil averiguó que la red delictiva también había actuado en otras provincias de la misma manera y perjudicando tanto organismos públicos como privados.
El pasado mes de junio la Guardia Civil situó el origen de estas prácticas delictivas en una Comunidad de Bienes con sede en Madrid, por lo cual solicitó la orden judicial de entrada y registro. En el registro se detuvieron tres personas, uno de ellos el jefe de la organización, como presuntos autores de delitos de estafa continuada y falsedad documental. También se incautómucha documentación relacionada con la trama que ha permitido identificar unas otro catorce personas a las cuales se les ha investigado por presuntos miembros de la organización delictiva.