Tres pueblos abandonados de Tarragona, protagonistas de un proyecto fotográfico
Los fotógrafos Diambra Mariani y Francesco Mion capturan el estado actual del Fonoll, Savella y Marmellar
Un proyecto fotográfico que retrata pueblos abandonados de toda España. Este es el trabajo que los fotógrafos Diambra Mariani y Francesco Mion han realizado para mostrar una nueva realidad de los municipios abandonados de todo el estado. «En los últimos años, docenas de pueblos abandonados han sido repoblados», aseguran a los fotógrafos a través de la presentación de su proyecto.
El Fonoll, el pueblo nudista de la Conca de Barberà; Marmellar, pueblo despoblado del Baix Penedès; y Savella, también en la Conca y muy próximo al Fonoll, son los tres núcleos de las comarcas tarraconenses que los fotógrafos visitaron para realizar el proyecto. El primero era un pueblo abandonado hasta que Emili Vives lo transformó en un núcleo nudista y naturista. Las personas pueden alojarse en un albergue, apartamentos y casas amuebladas o habitaciones, o incluso acampar. Pero para acceder a todos estos servicios hay que pagar una cuota ya sea anual, de día y noche o sólo de día, además del precio reglamentario para cada tipo de estancia.
Savella es un núcleo que se encuentra muy próximo al Fonoll. Situado en la parte occidental de Conesa, el pueblo todavía está abandonado y alberga la iglesia románica de Sant Pere de Savella, declarada Bien de Interés Nacional. Marmellar, finalmente, es una población localizada en el municipio de Montmell, en el Baix Penedès. El año 1976 hubo un incendio, y poco después el pueblo quedó abandonado. En 1993 se encontró una chica muerta, y se especuló mucho sobre los hechos.
Un estilo de vida menos consumista
Las repoblaciones, como en el caso del Fonoll, están mayoritariamente «relacionadas con el turismo rural y la agricultura ecológica, pero también con la industria turística en general», aseguran los fotógrafos. «El motivo por este nuevo interés de vivir en pequeños pueblos está directamente relacionado con la caída de los precios de los inmuebles, junto con la posibilidad de traballar online desde casa». Un estilo de vida menos consumista y la necesidad de vivir en contacto con la naturaleza y lejos de la contaminación de las ciudades hacen cada vez más propenso que pueblos como el Fonoll sean repoblados en los últimos años.