El Port, la industria y el tráfico, causantes de la presencia de ozono en el aire del Camp de Tarragona
Según un informe, todos los habitantes de Cataluña han respirado aire con este contaminante durante la primavera y verano del 2016
Un informe elaborado por el grupo Ecologistes en Acció revela que el tráfico, el transporte marítimo del Port de Tarragona y la actividad industrial son los principales causantes de la formación de ozono troposférico en el Camp de Tarragona. Y es que según el mismo informe, toda la población de Cataluña ha respirado aire contaminado por ozono durante la primavera y el verano del 2016, habiendo unos altos niveles que superan el límite recomendado por la Organización Mundial de la Salud (OMS) de este contaminante.
Los ecologistas reclaman a la consejería de Territorio y Sostenibilidad una respuesta a la petición, presentada el mes de junio pasado, para que la Generalitat adopte los planes de mejora de la calidad del aire para reducir los niveles de ozono en las zonas más afectadas, «como obliga la ley».
El documento ha analizado los datos de las 455 estaciones oficiales de medición de ozono instaladas en España, entre ellas 50 en Cataluña, y que afirman que el ozono troposférico es el contaminante atmosférico que cada año afecta a más gente y territorio. Los ecologistas han exigido que la contaminación por ozono sea un «problema sanitario de primer orden», que causa la muerte de 1.800 personas en España, y entre ellas las más afectadas son los niños, las mujeres embarazadas y las personas mayores con enfermedades respiratorias y cardiovasculares crónicas, según datos de la Agencia Europea de Medio Ambiente.
Costes sanitarios
El Banco Mundial ha establecido que los costes sanitarios derivados de la contaminación por ozono representan en torno a 5.000 millones al año, un 0,33% del Producto Interior Bruto (PIB) español, sin considerar el coste de los daños provocados sobre los cultivos y los ecosistemas naturales. Según un comunicado de los ecologistas, la Generalitat «lleva una década omitiendo la elaboración y aplicación de los mencionados planes, resultando preceptivos a todas las zonas de la Comunidad excepto Penedès-Garraf, Cataluña Central y Maresme, y que pone la salud de 1,2 millones de catalanes en riesgo».