Salou abandona el ambicioso plan urbanístico de Barenys y traslada su expansión en torno a PortAventura

Con el sector urbanístico del Barranc de Barenys paralizado desde hace un año por una sentencia del TSJC, el gobierno de Salou ha anunciado este lunes que traslada los planes de expansión del municipio al sector Emprius Norte, junto a la futura estación del ferrocarril y de PortAventura. Está previsto que este ámbito de 44,3 hectáreas acoja 2.000 habitaciones hoteleras, la ciudad deportiva municipal, 17.000 metros cuadrados de techo comercial y 6.000 para un parque de oficinas, además de unas 145 nuevas viviendas. Actualmente, el proyecto está pendiente del informe medioambiental y, una vez reciba el visto bueno de la Generalitat, el consistorio prevé iniciar la urbanización el año 2018 por importe de unos 16 MEUR.

El plan prevé la implantación de un máximo de cuatro complejos turísticos que permitirán ampliar la planta hotelera del municipio. Además, la ciudad deportiva municipal, dotada de 8,3 hectáreas de terreno, tiene como objetivo la captación de turismo deportivo y la desestacionalización de la temporada. Según el alcalde, Pere Granados, el proyecto que incluye tanto oferta turística como empresarial y de servicios permitirá reactivar la economía del municipio, ya que se estima la creación de unos 800 puestos de trabajo directos. Estos terrenos del sector 04-Emprius Norte limitan con la C-31b y el enlace con la C-14, el Vial de Caveto y el Paseo 30 de octubre. En este sentido, el concejal de gestión de Territori, Marc Montagut, ha señalado que la urbanización significará una mejora en las comunicaciones del municipio, dado que se creará un nuevo vial urbano que enlazaría con la autopista AP-7. El sector se ubicará al lado de la estación de autobuses y de la futura estación de ferrocarril, muy cerca de PortAventura.

Resolver las inundaciones de Barenys, prioritario

Malgrat la renuncia a la expansión del municipio en el ámbito del sector 03, los trabajos para resolver las inundaciones que genera el Barranc de Barenys, al barrio de la Salut, continúan.

El alcalde ha insistido en que se trabaja en la tramitación del proyecto del tramo final del torrente, que tiene que permitir llevar a cabo las expropiaciones previstas. La propuesta inicial contemplaba un caudal Q-200 -la probabilidad de inundación en un periodo de 200 años-, pero ahora se ha optado por aplicar el Q-500, que supondría doblar la capacidad de desagüe de la canalización y dar cumplimiento a la sentencia dictada por el TSJC.