Nueva retirada de pescado seco refrigerado, ahora procedente de Lituania, por un posible brote de botulismo
Se han retirado paquetes de entre 1 y 3 kilos de establecimientos de Salou y Tarragona, entre otras localidades catalanas
La Agencia de Salud Pública de Cataluña (ASPCAT) ha retirado 27 kilos de pescado seco y refrigerado procedente de Lituania de varios establecimientos de Cataluña después de que las autoridades sanitarias europeas hayan ampliado también en este producto lituano las sospechas del brote de botulismo detectado el mes pasado.
El ASPCAT ya retiró preventivamente de la comercialización el pasado 25 de noviembre 19 kilos de un pescado seco, salado y refrigerado, el Rutilo (Rutilus rutilus), producido en Holanda, después de aparecer un caso de botulismo en Alemania y dos en Valencia.
Ahora, la Agencia Española de consumo, Seguridad Alimentaría y Nutrición (AECOSAN) del Ministerio de Sanidad ha recibido nueva información por parte de las autoridades sanitarias alemanas en relación con el producto implicado en la alerta europea de botulismo por consumo de pescado.
De acuerdo con las nuevas informaciones, el producto sospechoso no es únicamente de origen holandés, sino que la sospecha se amplía en producto procedente de Lituania.
Así, el ministerio ha facilitado nuevas listas de distribución de producto recibido en el establecimiento Monolith Alimentos Espanya Nord de Cataluña.
Según ha informado el departamento de Salud de la Generalitat, después de recibir la nueva información, el ASPCAT «ha iniciado las actuaciones oportunas para verificar la retirada del mercado del producto implicado».
El producto, que ya se está procediendo a retirar, ha sido distribuido en pequeñas cantidades de entre 1 y 3 kilos en diferentes establecimientos alimenticios de Barcelona, Badalona, Castelldefels, Granollers, Salou, Tarragona, Lérida, Platja d'Aro y Lloret de Mar, y de las Islas Canarias (Tenerife).
En total, según el ASPCAT, se han distribuido desde Monolith Alimentos Espanya Nord 27 kilos de producto afectado.
Los establecimientos han colgado carteles informativos para avisar a los posibles compradores de que no consumen el producto.
Según la Generalitat, los servicios de vigilancia epidemiológica están dispuestos y no se ha notificado hasta ahora ninguna persona afectada en Cataluña.
Como medida de precaución, las autoridades sanitarias aconsejan a las personas que tengan algún envase de este producto se abstengan de consumirlo.
