El tió Estevet reparte golosinas además de 400 niños y niñas de Vila-seca

Este año las fiestas de Navidad se han concentrado en fin de semana, hecho que posiblemente hizo que, uno de los actos más esperados por los pequeños de las casas, fuera un éxito de participación.

Así, la víspera de Navidad, fueron muchas las familias que se acercaron hasta la plaza de la Iglesia para hacer cagar el tió Estevet, un viejo amigo del pueblo que, como cada año, se presentó puntualmente a la cita con los niños y niñas.

La ‘cagada del tió’ empezó a las seis de la tarde, y ya desde desde el principio las colas fueron largas. Pero los pequeños supieron esperar pacientemente que les llegara el turno de picar bien fuerte el lomo del tió sobre el escenario montado para la ocasión. Mientras hacían tiempo, aprovecharon para correr y jugar a la plaza, iluminada ya con las luces de Navidad.

Como maestros de ceremonias había un grupo de chicos y chicas del Esplai Esclop de Vila-seca. Ellos eran los responsables de ir llamando a los pequeños en el escenario, repartir los correspondientes bastones y asegurarse que todos los pequeños tuvieran su regalo con forma de golosinas. Un año más el Estevet no falló, y todos se marcharon contentos y satisfechos con las golosinerías en las manos. El Esplai Esclop de Vila-seca es una entidad de ocio que se puso en marcha el año 1984, con un total de 30 niños y niñas y 5 monitores.

Durante todo el curso, los miembros del Esplaise encuentran todos los sábados, y además realizan varias actividades complementarias, como la misma cagada del tió por Navidad, o juegos de descubrimiento en familia. Con un equipo de monitores y monitoras voluntarios, tienen como misión educar en el ocio los niños y niñas del pueblo, y formar, junto con sus familias, una gran comunidad. Concretamente, los objetivos recogidos en sus estatutos son: implicar a los niños en la vida social del municipio, aprender a ser respetuoso, responsable, participativo, solidario y autónomo; ofrecer a los niños alternativas de ocio educativo y saludable; fomentar la imaginación, la creatividad y el espíritu crítico a través del juego; favorecer el deporte, el excursionismo, el conocimiento de la naturaleza y los hábitos saludables; y reforzar los valores positivos de la convivencia, el compañerismo y el trabajo en grupo.

Además, el Esplai Esclop forma parte d'Esplac, Esplais Catalans, una asociación de esplais laica y progresista que trabaja desde el voluntariado para la transformación social, mediante la educación en derechos de los niños.