Tratar la revocación de Suñé en un pleno extraordinario es una pérdida de dinero, según el Gobierno municipal

La polémica sobre el presunto caso de fraude eléctrico que habría cometido el concejal torrense Lluís Suñé (ABG) en un bar de su propiedad se podría haber tratado al pleno ordinario de este jueves, con el consiguiente ahorro de dinero que eso habría supuesto para las arcas públicas. Por el contrario, la revocación del concejal, será debatida en una sesión extraordinaria a petición de los partidos de la oposición, los cuales –según el ejecutivo local– rechazaron hacerlo en el pleno ordinario. El equipo de Govern de Torredembarra afirma que el pleno extraordinario supondrá una «pérdida de tiempo y de dinero». La celebración de los dos plenos supondrá un dispendio de más de 13.000 euros en una sola jornada, todo para tratar una cuestión a la cual ya respondió el gobierno local en el plenario del 26 de enero y de la cual, por otra parte, ya ha hecho público su posicionamiento. El equipo de gobierno de Torredembarra asegura, a través de un comunicado, que «los grupos municipales de Ciutadans y PP rechazaron la petición del alcalde de incorporar su propuesta en el orden del día del pleno ordinario y se reafirmaron en la exigencia de celebración de lleno extraordinario, mientras que la concejala de Avui Democràcia ni aceptó recoger la notificación del escrito del alcalde». Por el contrario, los grupos de la oposición se acogieron al artículo 98.a de la Ley Municipal y de Régimen Local de Cataluña que establece que se puede convocar un pleno extraordinario cuando lo pide, al menos, una cuarta parte del número legal de miembros de la Corporación, cómo es el caso.