Agacuj, una asociación que vela por la cultura del jamón
El villa-secano Joan Fillat es codelegado de la delegación de la entidad en Tarragona
El Asociación Global de Amig@s del Cuchillo Jamonero (AGACUJ) es una entidad sin ánimo de lucro formada por personas que «siguen, defienden y trabajan todo lo que está relacionado con el mundo del jamón y la paletilla». En la práctica, el AGACUJ, que es de alcance estatal, tiene como objetivo informar a los consumidores que, a menudo se sienten desconcertados a la hora de escoger el jamón guiándose por las etiquetas.
La asociación cuenta con más de 160 socios en toda España, y entre sus miembros hay profesionales de la hostelería, cortadores de jamón, profesionales del sector, industriales, comerciales y, en definitiva, todo el mundo que pueda tener relación con el jamón. En Cataluña hay varios asociados, entre ellos el villa-secano Joan Fillat, profesional del corte de jamón. Él, junto con el también profesional José Espartero, han sido escogidos codelegados de la delegación piloto de la asociación a todo el Estado Español, que tendrá su sede justamente en nuestra zona.
Con esta delegación se pone en marcha un primer plan piloto con el objetivo de acabar extendiendo todo un sistema de delegaciones. Según el presidente del AGACUJ, Clemente Gómez, «la apuesta por Tarragona ha sido clara desde el primer momento, teníamos la necesidad de dar continuidad al proyecto como asociación nacional que somos, y Joan y José han mostrado una gran ilusión por representar y dar crecimiento al AGACUJ en esta zona de Cataluña».
Este nombramiento es bastante reciente, tuvo lugar en la última asamblea de la asociación, que se celebró a mediados del mes de febrero a Rota (Cádiz). No obstante, los codelegados de Tarragona ya han tenido tiempo de llevar a cabo alguna acción, como un curso de formación sobre la cultura del jamón y su corte|trozo para la Asociación Gourmet Pobla de Mafumet, que reunió a una veintena de profesionales de la alimentación y la gastronomía para ponerse al día sobre las diferentes tipologías de jamones que hay, sus características, etiquetado, partes de la pieza e incluso la manera correcta de cortar el jamón.
Joan Fillat apunta que su labor desde la delegación pasa por informar y formar a todas las personas interesadas en el mundo del jamón, y siempre de manera desinteresada y sin ánimo de lucro: «si alguien quiere hacer una sesión nosotros iremos, sólo ponemos como a condición de que el jamón que lleven cumpla con la normativa sanitaria 2014».
El compromiso social es otro de los pilares de la entidad, que ya el año 2016 estuvo presente en varios eventos de cariz benéfico. Para el año que empieza la idea es seguir trabajando también en esta línea.
En defensa de la verdad
El sector de la producción y venta del jamón es un negocio que cada año mueve grandes cantidades de dinero, especialmente en periodos como Navidad o el verano. Desde de AGACUJ se quiere poner de manifiesto que a menudo los consumidores son víctimas de mala praxis, a menudo porque desconocen la existencia de entidades de certificación pública del producto, así como de su funcionamiento, y que son garantía de autenticidad y origen: Denominaciones de Origen Protegidas (D.O.P), y sellos de calidad como las Indicaciones Geográficas Protegidas (I.G.P) y la Especialidad Tradicional Garantizada (E.T.G.).
No obstante, Fillat explica que a la asociación no están para señalar con el dedo o denunciar las personas que no hacen bien las cosas. «Nuestra finalidad es dar información, que el consumidor sepa qué está comprando y si lo que le están diciendo es cierto o no. Perseguir los que no lo hacen bien no nos corresponde a nosotros».
La asociación ha experimentado un gran crecimiento doblando el número de socios el último año, y con presencia incluso fuera de las fronteras españolas. Tal como apunta el presidente del AGACUJ, «necesitamos llevar|traer la verdadera cultura del jamón a todos los rincones del mundo a fin de que podamos valorar y conocer mejor nuestro producto más emblemático y de lo que, aunque parezca extraño, sabemos tan pocas cosas».