De la Serna culpa a la «falta de capacidad administrativa» el retraso del Corredor Mediterráneo

El ministro de Fomento, Íñigo de la Serna, culpa a la «falta de capacidad administrativa» de los retrasos que se han producido durante la última legislatura con respecto a las obras del Corredor Mediterráneo. Así lo ha asegurado en la reunión de la Mesa Estratégica del Corredor Mediterráneo que ha tenido lugar este lunes, con una amplia representación del sector de las empresas estatales, así como representantes de todas las fuerzas del arco parlamentario catalán.

En su intervención, el ministro también se ha comprometido a impulsar las obras. Por su parte, el conseller de Territori i Sostenibilitat, Josep Rull, y el conseller de Empresa i Coneixement, Jordi Baiget, han pedido al ministro un calendario de ejecución de las obras del Corredor «claro, cierto, previsible y evaluable» que cumple con los compromisos del gobierno español en la materia.

El acto ha reunido un centenar de personas en el Centro Blanquerna de Madrid y ha servido para dar a conocer el documento consensuado entre todos los partidos y el tejido económico y social catalán donde se apuntan las prioridades en la concreción del Corredor. El conseller de Territori i Sostenibilitat ha recordado que éste es un «documento de país» y ha reclamado «herramientas» para incorporar el «factor de la previsibilidad» en las obras del Corredor. Según el conseller, más allá de las «promesas» del ejecutivo español hace falta «ejecución» de las obras y «pasar de las palabras a los hechos».

Rull ha sido especialmente crítico con la concepción radial de las infraestructuras en el Estado que lleva, por ejemplo, que los usuarios de ferrocarril tarden menos en ir de Barcelona a Alicante si pasan por Madrid que directamente. «El centralismo es radicalmente ineficiente para el conjunto del Estado y para Europa», ha dicho antes de recordar que el Corredor representa el 40% del PIB del Estado. En este marco ha pedido al ministro esfuerzos para «sincronizar posiciones» entre el Estado, los territorios y Europa y para «superar el esquema del centralismo» también en los presupuestos generales del Estado, dónde en el 2017 «hay menos recursos» que en el 2016.

El conseller de Empresa i Coneixement, Jordi Baiget, también ha reclamado al ministro «certezas» y «calendario» en las obras del Corredor, y ha recordado que la franja que ocupa acoge el 60% de las empresas del Estado que importan y exportan. Baiget ha recordado, además, que las conexiones ferroviarias con los puertos son un «cuello de botella», y que hay inversiones privadas que están pendientes de ser ejecutadas por la «incertidumbre» sobre las obras.

El ministro, por su parte, ha insistido en que el Corredor Mediterráneo es «una prioridad política, económica y social» de su ejecutivo, y ha destacado «el esfuerzo» que está haciendo por llevarlo a cabo. De la Serna ha apuntado que la prioridad de su gobierno es «finalizar las obras en curso», aunque ha admitido que los «problemas técnicos y administrativos» durante la última legislatura han retrasado los plazos, ha prometido que a partir de ahora habrá un «seguimiento» de las actuaciones en marcha.

Según el ministro, «no estamos ante un problema de falta de recursos, sino ante las limitaciones en la tramitación administrativa» a la hora de licitar las obras. En este marco, ha apuntado que el tramo Tarragona-Vandellòs de 62 km del Corredor está previsto que esté terminado y en funcionamiento en el primer trimestre del 2018, mientras que el de Vandellòs-Castellón «estamos en trámites de reactivación de las obras», igual que el de Castellbisbal-Vilaseca.

De la Serna también ha apuntado que una de sus preocupaciones es acelerar el acceso de las mercancías a los puertos, y que en el caso del de Barcelona la previsión es que antes del verano se hayan licitado las obras del acceso ferroviario. Con respecto al acceso vial, ha apuntado que prevé tener terminadas las actuaciones en el 2019.

Autopistas ferroviarias

El ministro también ha anunciado que el BOE de este martes publicará un concurso convocado conjuntamente por el Estado y Francia para introducir las autopistas ferroviarias a las conexiones entre los dos países. Consisten en hacer posible que los camiones, ya sea sólo la carga o también la cabina, suban directamente en los vagones de los trenes. Según De la Serna, el concurso que se publica este martes es el «primer paso» para hacerlas realidad en el Estado.