Vila-seca volverá a llenar las calles con esculturas de libros

Con motivo de la celebración de la Festividad de Sant Jordi, Vila-seca volverá a sacar los libros usados y obsoletos a la calle para convertirlos en obras de arte. La iniciativa, que este año llega a la segunda edición, surgió de la concejalía de Cultura de l'Ajuntament de Vila-seca, y se ha bautizado con el nombre, ya definitivo, deEfímera, Arte en la calle . La exposición se llevará a cabo gracias al trabajo de los alumnos de la Escuela de Arte y Diseño de la Diputación en Tarragona, que este año repiten la experiencia, y de los alumnos de la escuela en Reus, que se han querido sumar a la iniciativa al ver el entusiasmo que despertó la pasada edición entre sus compañeros de Tarragona.

De esta manera, siete equipos de alumnos de estos centros de arte (seis de Tarragona y uno de Reus), realizarán sendas esculturas con libros en varios puntos de Vila-seca.

Los proyectos se empezarán a construir en las calles del centro histórico mañana jueves, y se podrán visitar hasta el lunes 24 de abril. Para llevarlas a cabo los artistas contarán con más de 20.000 libros usados, viejos y obsoletos, muchos de los cuales ya se utilizaron el año pasado y fueron almacenados a la espera de una nueva edición del festival artístico. Todos los ejemplares usados fueron cedidos por vecinos, por entidades y escuelas del municipio y por varias instituciones de la demarcación.

Efímera, Arte en la calle , que también cuenta con la colaboración de la Biblioteca de Vila-seca, quiere ser un punto de encuentro entre la participación ciudadana, la transformación y reciclaje de materiales y la creación artística. De esta manera, por ejemplo, la plaza de la Iglesia se llenará de libros transformados en pájaros, incidiendo en la idea de que la lectura nos hace volar a lugares lejanos. Los arcos y columnas de las Peixateries Velles se verán reforzados por la solidez de los libros, mientras que en el Portal de Sant Antoni crecerá una gran rosa con volumen, la estructura y los pétalos de la cual serán libros. En la plaza de Voltes brotará un árbol de libros, metáfora de las raíces culturales de Vila-seca, mientras que en la plaza de Estudi una instal·lacióen forma de cúpula invitará a los paseantes a entrar y leer, aislados del mundo exterior. Una sala de estar elaborada con libros en la Rambla de Cataluña cierra el paquete de propuestas presentadas por la Escuela de Tarragona. Los de Reus, por su parte, se harán suyo la calle Major y lo llenarán de poemas y rosas.

Arte que genera debate

El año pasado el Ayuntamiento de Vila-seca puso en marcha esta iniciativa, que en general tuvo una muy buena acogida entre los villa-secanos, pero que también dio lugar a un debate en torno al hecho de utilizar libros como objetos escultóricos, alejándolos de su valor y funciones originales. El concejal de Cultura de l'Ajuntament, Pere Segura, aseguró ayer durante la presentación del proyecto que lo que se generó el año pasado fue una «sacudida intelectual», y recordó que los libros se quedan obsoletos, que las bibliotecas tienen que ir renovando sus fondos y que se hacen destrucciones de papel, y apostó por el hecho de que estas esculturas nos estimulen este tipo de reflexiones.

Por su parte el director de la Escuela De Arte y Diseño en Reus, Joaquim Vilafranca, se mostró muy ilusionado con su incorporación al proyecto, y aseguró que es una gran oportunidad para sus alumnos, ya que les permitirá experimentar, a la vez que sus proyectos podrán ser disfrutados por la gente de la calle.

Finalmente, el profesor de la Escuela De Arte y Diseño en Tarragona, Àlvar Calvet, se mostró muy agradecido para poder volver a colaborar en la experiencia, y apuntó que hay una parte de la docencia de la escuela que, sin iniciativas como estas, sería imposible impartir: «poder vivir una experiencia real, compartida entre los profesores y los alumnos, es un lujo», aseguró.